Dolor

Grave denuncia de una paciente antes de fallecer por Covid-19 en un hospital: "Me están dejando morir"

Dramático relato de la joven a su familia mientras se encontraba internada en la localidad de Río Cuarto, Córdoba.
Noelia Mercado era estudiante de enfermería y tenía 33 años (Foto: La Voz del Interior).

Noelia Mercado era estudiante de enfermería y tenía 33 años (Foto: La Voz del Interior).

Antes de fallecer por Covid-19, una joven de 33 años denunció que en el Nuevo Hospital San Antonio de Padua de Río, Cuarto, Córdoba, la "estaban dejando morir".

La trágica historia corresponde a Noelia Mercado, madre de un niño de 11 y estudiante de Enfermería en la Cruz Roja local, que apuntó contra el nosocomio, en el marco del desborde de casos de coronavirus en Córdoba, que llevó a que se apliquen nuevas restricciones en la provincia desde la semana pasada.

"Acá me dejaron morir como un perro, sola”, publicó en su cuenta de Facebook, Noelia el miércoles 2 de junio a las 2:04. “Estoy saturando 83 y el médico que vino hace una hora y se fue, no vuelve. Pedía una muerte digna al menos”, agregó un minuto después.

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Lo único que ella podía hacer era escribir en las redes porque ya no tenía aliento”, contó su mamá, Teresa, a los medios locales. La mujer, unos días antes, había recibido desesperados pedidos de auxilio de su hija por Whatsapp: “Sacame de acá. Me obligan a levantarme y no puedo caminar porque me agarra tos y me quedo sin aire. Estoy toda meada en la cama, traeme pañales”.

“Mamá estoy muy mal, acá llamás y nadie viene a ayudarme, yo grito y nada”, fue uno de los últimos mensajes que llegó a mandar. Su situación era tan dramática que imploró a su madre: “Comprá un oxígeno y llevame a casa”.

La versión desde el Nuevo Hospital, tras la muerte de Noelia

La vicedirectora del hospital, Valeria Alaniz, confirmó que el día 28 fue a consulta, a la carpa de pacientes ambulatorios, y se le hicieron controles. “Su factor de riesgo era el peso. Se le indicó una radiografía, que detectó una pequeña neumonía en la base izquierda”, pero como la saturación de oxígeno era aceptable se la medicó y citó a un control a las 48 horas”, relató.

“El 31 se le hizo una nueva valoración y se decidió internarla. Comenzó a empeorar como nos sucede en muchos de los pacientes, por más que tengan oxigenoterapia. El 2 a la madrugada tuvo una demanda mayor de oxígeno, se intentó terapia de alto flujo. Luego fue derivada a terapia para una asistencia respiratoria. El sábado falleció. Siempre recibió toda la atención por parte de enfermería médicos y kinesiología”, aseguró Alaniz.

“Era una futura compañera y la hemos perdido, ella se hubiese recibido de enfermera. Nos ha pegado muy fuerte a todos como cada paciente que nos sorprende de esta forma, con una evolución tórpida, muy rápida. Se la atendió en tiempo y forma por todos los profesionales”, agregó Alaniz.