Báez está detenido desde 2016 en el marco de la causa conocida como “la ruta del dinero K”, que actualmente está en juicio. Y López y De Sousa están con prisión preventiva por la causa “Oil Combustibles”, también actualmente en proceso de debate oral y público.
Según el requerimiento del fiscal la compra venta del terreno se habría hecho para “introducir en el mercado dinero proveniente de un ilícito penal, valiéndose a tal fin de la concertación de un precio por un bien inmueble que se hallaba sustancialmente por encima de su valor real”.
La hipótesis de los funcionarios judiciales es que el dinero ilícito blanqueado en las maniobras investigadas provendría, en el caso de Báez, de las maniobras defraudatorias investigadas en la causa “Obra Pública”, actualmente en juicio. En tanto que la intervención de las empresas de Cristóbal López en la operatoria sospechada en esta causa se podría deber al intento por blanquear bienes de origen ilícito obtenidos producto de la supuesta defraudación al fisco, investigada en la causa “Oil Combustibles”.