Intento de magnicidio

La extrema derecha, los neonazis y las redes: el trasfondo emergente detrás del atentado a Cristina Kirchner

El atentado a Cristina Kirchner, ocurrido en el barrio porteño de Recoleta, dio visibilidad a un submundo que hasta hace poco no tenía gravitación en la política.
Ayelén Bonino
por Ayelén Bonino |
Las derechas y el espacio público. Foto: archivo

Las derechas y el espacio público. Foto: archivo

Desde hace tiempo que actúan en las sombras. Lejos de extinguirse o agotarse, las extremas derechas parecen haber recobrado una vigencia que décadas atrás era impensada. E n las redes sociales encontraron el caldo de cultivo donde desarrollarse de forma subrepticia y en muchos lugares del mundo lograron desembarcar en la arena política. La pandemia les sirvió como catalizador y ahora se muestran sin disimulo en la superficie.

En nuestro país, e l atentado a Cristina Kirchner, ocurrido el 1° de septiembre en el barrio porteño de Recoleta, dio luz a un submundo que hasta hace poco era ignorado por muchos. Según los especialistas, lo integran grupos que oscilan entre sectores del tradicionalismo católico y el nacionalismo más xenófobo, hasta libertarios y anarcocapitalistas.

Algunos de estos espacios generaron días atrás interés al quedar relacionados, de manera directa o indirecta, a los protagonistas del intento de asesinato contra la Vicepresidenta. Entre ellos, se llegó a mencionar a los neonazis, debido a los tatuajes que lleva en sus brazos Fernando Sabag Montiel, y a la agrupación Revolución Federal, quien tendría a Brenda Uliarte como una de sus adherentes.

Las redes sociales y la extrema derecha

“Considero que la extrema derecha se caracteriza por ser antisistema y no participar en elecciones. Por otro lado, están los grupos de la derecha radicalizada, que, aun con un discurso antipolítico, forman parte del juego democrático”, explica a A24.com Matías Grinchpun, doctor en Historia, becario posdoctoral del CONICET e investigador de este tipo de movimientos.

De acuerdo con este experto, mientras que en las derechas radicales hoy los más convocantes en nuestro país están en el ámbito de los libertarios, en la familia de las extremas derechas los espacios más importantes están vinculados al tradicionalismo católico. "Esta situación la podemos retrotraer hasta 2019, con derechas que venían actuando hace mucho y sectores libertarios en auge", detalla.

En este desarrollo, las redes sociales tuvieron un rol central. “En todos los países, entre los primeros grupos que armaron foros online estuvieron los de extrema derecha porque esto les ofrecía la posibilidad de reunirse en un lugar donde no los pudieran perseguir con la legislación vigente. En la medida que se fue extendiendo la conectividad, esto explotó”, argumenta Grinchpun.

computadora ciberataque
Foto: archivo.

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Para Ariel Gelblung, director ejecutivo del centro Simón Wiesenthal para América Latina, la actividad online de este tipo de agrupaciones no para de crecer y es un fenómeno mundial. "Cuanto más extremos y antisistema son, más marginal es la red social en la que se desarrollan. Facebook tiene algunas reglas. Hay otras redes que no tienen ninguna y ahí es donde todo vale", afirma.

De acuerdo con su análisis, una de las formas para lograr nuevos reclutas es a través de, por ejemplo, diferentes plataformas de juegos online. "Hay determinados chats privados donde te van invitando y se compran y venden juegos. Es ahí donde hay comunidad", analiza.

La pandemia y las calles

En este contexto, la cuarentena también funcionó como un gran catalizador. "Hoy hay muchísima participación y la pandemia agravó la situación", asevera Gelblung. “Fue como meter todo en un gran horno con las redes sociales, donde las interacciones se terminaron concentrando por el propio aislamiento”, coincide Grinchpun sobre el coronavirus, y distingue un hecho revelador.

"Lo que pasó es que estas derechas empezaron a tener más seguidores y más actividad en las redes, pero al mismo tiempo hubo una insuficiencia. Esta militancia en las redes es algo que las extremas derechas lograron capitalizar muy bien y que se pudo traducir en un éxito electoral concreto en nuestro país, pero a muchos esto les resultó insuficiente", recalca.

En este sentido, tomó preponderancia la ocupación del espacio público. “Algo que va a ser clave es cómo frente a la cuarentena y la afinidad de la centroizquierda y el progresismo con el aislamiento, se generaron movimientos para ganar las calles de ciertos sectores de derecha, con movilizaciones anticuarentena y antigobierno desde mediados de 2020”, argumenta Grinchpun.

Neonazis y Revolución Federal

En este marco nació Revolución Federal, que ganó resonancia años atrás por usar guillotinas de madera y antorchas en sus movilizaciones, así como por sus escraches contra políticos del oficialismo en la vía pública. En los últimos días, tomó protagonismo también por el atentado a Cristina Kirchner y su presunta vinculación con Brenda Uliarte, una de las procesadas.

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"Dentro de las viejas estructuras, como las del tradicionalismo católico y las de los nuevos partidos libertarios, comienzan a aparecer otros grupos, como Revolución Federal, que son como vástagos, como gajitos de viejas plantas", expresa Grinchpun. De acuerdo con el experto, este espacio aparece a mediados de 2021 con jóvenes que tienen poco más de 20 años y que vienen de situaciones de precarización laboral.

"Ellos recuperan el discurso libertario con una praxis que no es la de los libertarios, que es la del discurso 'cárcel o bala'", detalla, y explica que su esencia estaría en la práctica para llevar adelante un objetivo que consideran urgente, una característica que los diferencia de la mayoría de las agrupaciones más tradicionales.

Otros de los espacios que también ganó lugar en la agenda pública en los últimos días es el de los neonazis, debido a los tatuajes de Fernando Sabag Montiel: un Sol Negro, una Cruz de Hierro y el Martillo de Thor. Estas agrupaciones se caracterizan por su reivindicación al tercer Reich, su antisemitismo y el negacionismo del Holocausto, así como una postura anticomunista y una impronta ligada al ocultismo y a ciertas bandas de metal.

"Sin embargo, ellos no serían de los más activos. Yo lo que noto es que se mantienen estables, pero no ha habido una explosión de parte de ellos, como sí de otros sectores, como es todo lo que está cerca de la gran familia del tradicionalismo católico", asevera Grinchpun, y a modo de ejemplo, recuerda un resonante canal de YouTube que solía nuclear su actividad con entrevistas a viejos nacionalistas. Entre sus figuras más mediáticas, tuvo su ciclo allí una famosa exvedette que hablaba en contra del aborto, de las vacunas y hasta de la comunidad LGBTIQ+.