El arribo ocurrió con un megaoperativo. Stella bajó de un helicóptero, fue recibida por su abogado Rodolfo Baqué con un profundo abrazo, y se dirigió a reencontrarse con Maia, custodiada por efectivos policiales.
"Está contenta, está muy bien. Voy a agradecer a Berni, a los abogados, a la gente que ayudó y a los medios que hablaron de esto. Ella está bien. No le preguntamos nada, lo que queríamos es abrazarla. Estamos felices. Está súper tranquila y feliz", manifestó minutos más tarde Gabriela, la tía de Maia, a los medios.
"Una mamá es una mamá siempre, no la abandonó", expresó Baqué. "Cuando hablaron por teléfono, Maia le preguntó 'mamá, ¿cuándo venís? Te extraño'", narró el abogado, y agregó: "Todos pensábamos lo peor, pasó mucho tiempo con este chacal. Esta lacra no ofreció ninguna resistencia. Le pido a Dios que no haya habido un abuso".