La Casa Rosada destinará parte de los 4350 millones de dólares en Derechos Especiales de Giro (DEG) que recibirá en agosto del FMI para pagar los vencimientos de la deuda previstos para este año.
La Casa Rosada destinará parte de los 4350 millones de dólares en Derechos Especiales de Giro (DEG) que recibirá en agosto del FMI para pagar los vencimientos de la deuda previstos para este año.
Así lo confirmaron este lunes fuentes de la Casa Rosada a A24.com, que señalaron que "las negociaciones siguen" con el ministro de Economía, Martín Guzmán, a la cabeza y se muestran ilusionados hasta con la posibilidad de cerrar un acuerdo con el FMI incluso antes de las elecciones legislativas de noviembre.
"Los DEG parece que se van a destinar para pagar el vencimiento de 1.800 millones de dólares del 30 de septiembre", señalaron las fuentes consultadas por este portal tras recordar que ese fue el mensaje que lanzó Cristina Kirchner en el acto del sábado en Escobar durante la presentación de los candidatos del Frente de Todos.
La decisión, según pudo saber A24.com, fue consensuada entre Alberto y Cristina durante una conversación que mantuvieron el pasado viernes sobre ese tema y acordaron ponerlo como uno de los principales ejes de la campaña electoral.
Mientras, desde el Ministerio de Economía sostenían un fuerte hermetismo, justamente porque Guzmán no quiere quedar interpretando el mensaje de la jefa de la coalición de Gobierno que internamente cuestiona al ministro por impulsar un ajuste en línea con lo que pide el organismo de crédito.
Según confirmó el FMI, la Argentina recibirá en el mes de agosto 4.350 millones de dólares como parte de los Derechos Especiales de Giro (DEG) que le corresponden en el marco de la ayuda extraordinaria que dará el Fondo a todos los países miembro para hacer frente a la crisis de la pandemia.
Cristina había sido la principal impulsora de un proyecto de ley del Frente de Todos en el Senado para que ese dinero se destinara exclusivamente para paliar las consecuencias de la pandemia (este es incluso el fin que impone el FMI), pero ante el desborde inflacionario y la incertidumbre por las presiones sobre el dólar y una nueva devaluación, la vicepresidenta y Alberto Fernández acordaron enviar el mensaje de pagar y evitar el default en los próximos vencimientos, para intentar frenar las especulaciones en medio del proceso electoral.
"La realidad es que hasta 2018 le debíamos 0 dólar al Fondo y hoy tenés 45.000 millones de deuda que renegociar porque lo que estaba acordado en tan corto plazo es inviable para cualquier país", repiten en los pasillos de la Casa Rosada a tono con los discursos del Presidente y de la Vice.
Cristina llamó el sábado al presentar a los candidatos del Frente de Todos, a "discutir y debatir con responsabilidad" con la oposición "cómo y quién va a pagar la deuda que ellos (por Juntos por el Cambio) dejaron".
El tema de la deuda con el FMI quedó este lunes finalmente en centro del escenario electoral cuando el presidente Alberto Fernández encabezó el primer acto de campaña en Merlo, pleno conurbano bonaerense, con ministros y los dos primeros candidatos a diputados nacionales de la provincia de Buenos Aires, donde justamente la crisis económica por la inflación, arrasa a los más pobres y pone en riesgo un triunfo holgado del peronismo en su principal bastión.
De confirmarse el pago de los 1800 millones el 30 de septiembre, el Gobierno buscará exhibir que nuevamente es el que más cumple de las fuerzas políticas, mostrando los antecedentes de Néstor Kirchner en 2007 y de Guzmán con los privados en 2019.
Sin embargo, en la Rosada ponen en duda la cancelación del vencimiento previsto para noviembre, justo en el mes de las elecciones legislativas. Otra posibilidad que se evalúa es postergar ese vencimiento si antes logran cerrar un acuerdo por la reestructuración de la deuda total.
El objetivo del Gobierno es "mostrar a Alberto Fernández plantándose ante el Fondo, defendiendo los intereses de los argentinos" y reclamando una extensión de los plazos de pago de un nuevo acuerdo de Facilidades Extendidas (a más de 10 años) y bajar las sobretasas de interés que por haberse excedido en lo que el crédito solicitado durante el gobierno de Macri, ahora ronda por encima del 3%.
Hoy el propio Alberto Fernández siguió con el discurso de "plantarse ante las exigencias del FMI". En un acto de entrega de viviendas Procrear en Merlo, el Presidente apuntó contra la oposición y pidió "a los argentinos que se pregunten qué tipo de Estado quieren, aquel que recomienda enamorarse de los funcionarios del FMI", en referencia a la negociación llevada a cabo por Mauricio Macri para contraer deuda, o el modelo kirchnerista que "se planta, se pone de pie y le dice que no hará sufrir a los argentinos".
Otro debate abierto en la Casa Rosada después del maratónico cierre de listas es qué pasará con el gabinete nacional, dado que hay dos ministros: el de Desarrollo Social, Daniel Arroyo y de Defensa, Agustín Rossi, que compiten como candidatos en las PASO en provincia de Buenos Aires y en Santa Fe, respectivamente, y se abre una nueva pelea interna por quiénes asumirán en su reemplazo.
El propio Rossi anticipó que seguirá en el cargo por lo menos hasta las elecciones de noviembre y en caso de ganar una banca, podrían extender su continuidad en el Gobierno hasta el día mismo de su asunción en el Congreso, el 10 de diciembre.
Por el momento cerca de Santiago Cafiero insistían en que antes de hablar de cambios de Gabinete "hay que esperar" y que "los cañones" del Gobierno están puestos en continuar y profundizar la agenda de la reactivación productiva y cuidando la salud de los argentinos, completando el plan de vacunación.