El ranchito de Justin, ubicado en Los Ángeles, costó nada menos que 6 millones de dólares, y lo convirtió en vecino de celebridades de la talla de
Britney Spears y Steven Spielberg.
Según describe el portal sensacionalista The Sun, la casa cuenta con una pileta enorme y una casa de huéspedes lo suficientemente grande para la visita de numerosos familiares y amigos. Además, posee un garaje espacioso, pensado fundamentalmente para albergar la flora de autos de lujo que está coleccionando Justin, como un Range Rover, un Cadillac y una Ferrari.
El joven cantante tiene la intención de derrochar más dinero en la fabricación de la mansión como en la alta tecnología como sea posible, con un sistema informático para que pueda controlar las persianas, las luces y los aparatos con el toque de un botón. También planea un dormitorio adolescente, con las consolas de juegos y máquinas recreativas, así como una sala de cine en casa.
El millonario canadiense estuvo buscando casa en Hollywood por un tiempo, y casi compró una propiedad que
Ashton Kutcher está alquilando. Pero, de acuerdo a los informes en los EE.UU., la casa de Calabasas lo enloqueció, en un amor a primera vista.
El nuevo single de la estrella, “Novio”, se libera en la medianoche de hoy en Estados Unidos e Inglaterra y promete ser un nuevo gran éxito.