Karina Jelinek no quiere ver a Lao Fariña ni en figuritas. La modelo, quien asegura que se casó enamorada del hombre de rodete, atraviesa ahora instancias judiciales con su ex.
Karina Jelinek no quiere ver a Lao Fariña ni en figuritas. La modelo, quien asegura que se casó enamorada del hombre de rodete, atraviesa ahora instancias judiciales con su ex.
La mala relación entre ambos comenzó cuando el morocho fue sorprendido muy acaramelado con otra mujer y luego, los escandalosos pases de factura los pusieron a ambos en situación de guerra.
Ahora, la modelo, quien llevaba con orgullo un tatuaje del nombre de Fariña: “Leo”, acaba de modificar esa palabra para concederle otro significado. Donde antes decía "Leo" ahora dice "Leona".
“El dolor me hizo una leona: quiero defender todo lo que la Justicia diga que es mío y que investiguen todas las cosas turbias que él tiene ", dijo Jelinek a la revista Caras.
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