Geraldine Chaplin contó que, sin embargo, un día lograron escaparse con su hermano Michael a un cine, donde vieron su primera película en color, "Quo Vadis", de Mervyn Le Roy, con Robert Taylor y Deborah Kerr (1951). "Había color, leones, cristianos, leones que se comían a los cristianos...los dos pensamos «¡papá es una mierda!»'", recordó entre risas y sin ruborizarse ni un poco por la palabra un tanto fuera de lugar, aunque jamás perdió el encanto.La reconocida actriz también relató lo que describió como "un golpe terrible en su infancia". Una mañana bajaron con su hermano al portal de la mansión californiana en la que vivían y empezaron a cantar "somos los hijos de Chaplin, somos los hijos de Chaplin" a los peatones que pasaban por allí. Hasta que una mujer se detuvo y les preguntó: "¿Y quién es Chaplin?". "Fue un golpe terrible. Con mi hermano nos preguntamos: «Puede ser que todo sea mentira?»", dijo entre risas."En realidad, más que mi padre, mi héroe era Charlot", confesó la actriz, quien entre sus muchos papeles interpretó a su propia abuela, Hannah Chaplin, en la película de 1992 de Richard Attenborough sobre la vida de Chaplin con Robert Downey Junior como el genial cómico y cofundador del estudio United Artists."Como hombre, mi padre fue un reflejo impresionante de sus tiempos", afirmó la actriz, que recordó que éste rodó el corto "The Inmmigrant" en 1917, donde ya señalaba las vicisitudes por las que pasaban los inmigrantes para llegar a Nueva York; "Shoulder Arms" en 1918, considerado uno de los mejores retratos de la Primera Guerra Mundial; "Modern Times", una crítica aguda del fordismo en 1936; o "The Great Dictator" en 1949, donde parodiaba a Adolf Hitler, en una de sus más emblemáticas interpretaciones."Ha sido un gran humanista, un defensor de la justicia. Nunca se cambió de chaqueta, siempre fue fiel a sus principios", dijo la actriz, quien consultada acerca de dónde provenía la gran sensibilidad de su padre, concluyó emocionada: "Si supiera de dónde provenía la sensibilidad de mi padre pediría una dosis para todos los dirigentes del mundo".