Por la sequía, el FMI modificará la meta de reservas y autorizará un nuevo desembolso (Foto: Prensa Economía)
Marzo representará un desafío para afrontarlos vencimientos del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) Por estas horas, el Gobierno espera novedades de Washington sobre le revisión técnica de las metas del último trimestre del 2022 y así destrabar el próximo desembolso que será clave para pasar el mes.
El equipo que encabeza Gabriel Rubinstein, integrado por secretario de Hacienda, Raúl Rigo, y el jefe de asesores, Leonardo Madcur, llevó adelante las negociaciones que lograron una modificación en la meta de acumulación de reservas por la guerra en Ucrania y la sequía que afecta la producción agrícola.
En ese sentido, se espera que el staff técnico del organismo de el visto bueno para que el Board, tal como indica el procedimiento del Fondo, termine de confirmar el desembolso que se estima será de u$s5.400 millones y que llevará alivio al Banco Central, que durante febrero debió batallar con una fuerte demanda.
Sin embargo, casi la mitad del giro se irá en vencimientos del propio acuerdo de Facilidades Extendidas. El 21 de marzo vencen u$s927 millones y al otro día unos u$s1.789 millones que totalizan unos u$s2.700 millones, según datos de la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC).
Se cree que el giro del dinero para reforzar las reservas se aprobará el 22 de marzo próximo, lo que llega un día tarde para pagar los vencimientos, por lo que la intención está puesta en que las metas se aprueben lo antes posible.
El giro del FMI llegará en DEGs, la moneda del FMI, y si bien la meta de reservas cambiará, en materia fiscal y financiamiento monetario la idea es sostener lo previsto.
La Argentina sobrecumplió las metas de reservas, fiscal y de financiamiento del Tesoro correspondientes a la cuarta revisión. Las reservas netas ascienden a unos 4.400 millones de dólares, según cálculos de la casa de bolsa PPI Inversiones
Aún no se precisaron cuales serán las nuevas metas: el país tiene previsto en el acuerdo una reducción del déficit fiscal primario del 2,5% del Producto Bruto Interno (PBI) en 2022 al 1,9% para este año, y una disminución de la asistencia financiera del Banco Central (BCRA) al Tesoro de 1% a 0,6%.
Un tema que queda aún pendiente entre el Gobierno y el FMI es los sobrecargos. La semana pasada, ante la Cumbre del G20 de Ministros de Finanzas y Gobernadores de Bancos Centrales, en la ciudad india de Bengaluru, el ministro de Economía, Sergio Massa, cuestionó al FMI por no revisar su política de sobrecargos, por entender que se trata de una decisión "regresiva, porque recae sobre los países con mayores necesidades de financiamiento", como la Argentina.
Los sobrecargos -también llamados sobretasas- son cobros adicionales que aplica el FMI sobre determinados préstamos que otorga, por lo cual encarecen las tasas de interés.
