Mantener limpio el inodoro es fundamental para evitar la acumulación de bacterias y gérmenes que pueden provocar infecciones y enfermedades. Enterate cómo eliminarlos con solo dos ingredientes.
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La limpieza frecuente de todos los espacios de la casa es algo fundamental para mantener la higiene y evitar todo tipo de enfermedades, más aún cuando se trata del baño y especialmente en el inodoro. Este truco que te vamos a contar, no solo es muy práctico y efectivo, sino que también es amigable con el medio ambiente y para tu bolsillo. Te contamos cómo usar estos dos ingredientes que seguro tenés en casa para mantener tu inodoro impecable.
El uso de vinagre y bicarbonato de sodio es una forma precisa de resolver tanto los problemas estéticos, como los de higiene en tu baño. Este método no solo se utiliza para eliminar el sarro que se acumula constantemente, sino que también previene la aparición de bacterias como E. coli y Salmonella, que pueden afectar directamente en tu salud.
El bicarbonato de sodio funciona como un abrasivo suave que ayuda a eliminar manchas, sin dañar la superficie del inodoro, mientras que el vinagre blanco, por ser ácido, ayuda a disolver el sarro y combatir las bacterias.
Al mezclar ambas, genera una reacción burbujeante que mejora la capacidad de limpieza, y hace que las manchas desaparezcan con más facilidad.
Como te venimos contando, son pocos los ingredientes que se necesitan: vinagre blanco y bicarbonato de sodio, a esto, hay que sumarle los siguientes elementos: una taza y un cepillo.
Con este método efectivo, tu inodoro va a quedar como el primer día que lo compraste o que lo viste, agregando que vas a garantizar un ambiente más saludable y agradable sin gastar de más.
