40 horas de angustia
Los equipos de rescate lucharon durante casi dos días para producir este milagro. Lograron rescatar a los dos mellizos debajo de los escombros.
Ahmet Erbay, el niño,fue el primero en ser rescatado entre los escombros de Gaziantep, una de las zonas más afectadas por los dos terremotos de magnitud 7,7 y 7,6 en la escala de Richter que conmovieron a Turquía y Siria.
Poco después, lograron extraer de entre los restos de lo que era su vivienda a su hermana, Amine Elcin. Los gemelos fueron revisados rápidamente por los paramédicos antes de ser enviados a un hospital.
La historia terminó felizmente para toda la familia. Los padres también pudieron salir con vida de los escombros. Primero lograron sacar a Pinar, la madre de los gemelos y luego al padre, Ibrahim Karapirli. Los cuatro pudieron reencontrarse en el hospital.
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Uno de los gemelos, envuelto en una manta es evacuado de los restos de lo que fue su vivienda (Foto: Gentileza Yenisifak)
La felicidad de los rescatistas
Mientras las cámaras no perdían detalle del rescate, el momento de mayor felicidad ofreció dos sonidos dominantes. Los gritos, aplausos y sonrisas de los rescatistas, felices de haber podido tomar sanos y salvos a los niños luego de 40 horas. Al mismo tiempo, se escuchaba el llanto de los gemelos mientras eran abrigados y llevados hasta la ambulancia que los derivó a un hospital. En las grabaciones - muchas por los celulares de los propios rescatistas - se escucha claramente el grito "mucize geliyor" ("se acerca el milagro").
El terremoto que asoló a Turquía y Siria está próximo a pasar la cantidad de muertos de 1999, cuando fallecieron 17.000 personas. La peor catástrofe se dio en 1939 cuando un sismo causó la muerte de 30.000 personas.