Poder Judicial

La justicia deberá resolver si Javier Milei cometió delito al lanzar su campaña contra el "wokismo"

Se presentaron al menos 4 denuncias por intimidación pública, incitación a la violencia y apología del crimen. ¿Cuáles son los argumentos de los demandantes y de la defensa del presidente?

Rosario Bigozzi
por Rosario Bigozzi |

Los polémicos dichos del presidente Javier Milei en el Foro de Davos acusando a la “ideología woke” de ser “el cáncer que hay que extirpar" tuvieron su repercusión en los Tribunales de Comodoro Py donde deberán evaluar si constituyen o no delito.

En pleno receso judicial se presentaron al menos cuatro denuncias contra Milei por sus duras críticas al “wokismo”, que según sus expresiones, constituye un plan sistemático de la casta política “para justificar la intervención estatal y el aumento del gasto público”.

En suma, las demandas piden que se investiguen los delitos de intimidación pública, incitación a la violencia, amenazas contra el honor, coacción y apología del crimen. Fueron presentadas por el abogado de Cristina Kirchner, Gregorio Dalbón; la ex diputada nacional del Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS), Myriam Bregman; y el Secretario General de ATE Capital, Daniel Catalano.

La semana próxima la justicia deberá definir si habilita la feria para iniciar los trámites del proceso, o lo posterga para febrero cuando se retome la actividad normal. Es posible que las causas resulten unificadas en el juzgado federal 6 que subroga el juez Daniel Rafecas, quien a su vez será reemplazado hasta fin de mes por su par Sebastián Ramos.

El presidente inauguró en el Foro de Davos su “primera cruzada” mundial por “la reducción drástica del tamaño del Estado", lo que provocó una enorme cantidad de discrepancias.

Para empezar defendió que se haya formado “una alianza internacional de todas aquellas naciones que queremos ser libres y que creemos en las ideas de la libertad” (Elon Musk, Giorgia Meloni; Bukele, Viktor Orbán. Benjamín Netanyahu y Donald Trump).

Culpó al wokismo de “promover el aborto”, “la agenda LGBT”, “el siniestro ecologismo radical y la bandera de cambio climático”; y expresó que “son momentos donde las reglas se reescriben y por eso son tiempos que recompensan a quienes tienen el coraje para tomar riesgos”.

Antes de leer su discurso en Davos, había publicado en X una ardiente defensa a Elon Musk acusado de realizar un saludo nazi en la asunción de Donald Trump. Indicó que la progresía internacional se monta sobre un inocente gesto “porque su lucha por la libertad atenta contra el control hegemónico del wokismo internacional”.

Finalizó “no sólo no les tenemos miedo. Sino que los vamos a ir a buscar hasta el último rincón del planeta en defensa de la LIBERTAD. Zurdos hijos de putas tiemblen.La libertad avanza”.

ESumó otro posteo donde escribió que “mientras los imbéciles de izquierda se entretienen con el saludo de Elon (inventando estupideces porque no se aguantan que haya expandido nuestra libertad a costa de que ellos pierdan el monopolio del relato), Elon se entretiene generando conectividad global de celulares!”.

A todo esto, se metió en la polémica el proyecto del gobierno para eliminar las normas que imponen cupos para personas transexuales o discapacitados, la figura legal de femicidio, la reparación económica para los hijos de las mujeres asesinadas, y la entrega de documentos no binarios.

¿Por qué aseguran que Milei cometió un delito?

La primera demanda que ingresó al sistema de gestión judicial fue la de Gregorio Dalbón solicitando que se habilite la feria y se cite a indagatoria a Javier Milei por incitación a la violencia e infracción a la Ley Contra la Discriminación.

Más tarde, pidió la ampliación por amenazas, intimidación pública, y apología del delito. También propuso que se remita una copia de la denuncia a la Cámara de Diputados para que se inicie un procedimiento de juicio político.

En el escrito puntualizó que el discurso del primer mandatario “promueve estereotipos negativos y legitima actos de violencia y odio hacia una comunidad ya vulnerada como lo es el colectivo LGBT+”. Además, cuestionó que cuando Milei afirmó “zurdos hijos de putas” generó un clima de hostilidad y persecución.

Sobre la posible derogación de las penas por femicidio, Dalbón le dijo a A24.com que sería un retroceso porque esa figura legal es una conquista tras los numerosos asesinatos de mujeres por su condición de género.

Aclaró que se aplica cuando una mujer es asesinada por su marido o por los abusos que ha sufrido, en tanto que si matan a una mujer en el robo a una farmacia se califica como homicidio.

Según su criterio esta propuesta no prosperará porque antes Milei deberá comprender que no es un privilegio que exista la calificación de femicidio.

Por su parte, el secretario general de ATE Capital, Daniel Catalano, acusó al jefe de Estado de instigación a la violencia porque sostuvo públicamente que “se debería perseguir en cualquier caso a personas que posean determinada condición ideológica, política o económica”.

Opinó que Milei “actúa como mínimo con dolo eventual” porque la instigación fue realizada con conocimiento y con voluntad de hacerlo. Aunque tiene dudas de que la justicia tome en cuenta la demanda, Catalano se inclinó por la opción de usar todas las herramientas de la democracia para frenar los impulsos del gobierno.

Otra de las denuncias fue firmada por la exdiputada Myriam Bregman, quien le confirmó a A24.com que junto con el Frente de Izquierda se presentaron como querellantes, porque creen que las declaraciones del presidente de la Nación no pueden enmarcarse en el derecho de expresión que tiene cualquier persona.

Bregman reforzó que Milei “es el jefe de Estado, maneja las Fuerzas Armadas, las Fuerzas de Seguridad, los servicios de inteligencia y desde esa posición nos dice que “los vamos a ir a buscar hasta el último rincón del planeta”.

Completó que “la gravedad es mayor aún porque aclara que lo hará a partir de nuestras opiniones políticas, no por un hecho tal o cuál, sino simplemente por ser “zurdos”, lo que viola claramente la Ley Antidiscriminatoria”.

Recordemos que el delito de incitación a la violencia prevé una pena de prisión de 3 a 6 años; realizar amenazas se reprime con prisión de seis meses a 4 años, dependiendo si sirven para intimidar o para coaccionar sobre alguien. A su vez, el Código fija una pena de 2 a 6 años de prisión a quienes infunden el temor público; mientras que por apología del delito prevé de un mes a un año de cárcel.

La defensa de Milei

El abogado defensor de Javier Milei en causas penales y ex candidato a vicegobernador bonaerense por La Libertad Avanza, el doctor Francisco Oneto, anticipó que los dichos del presidente no constituyen amenazas porque “no fueron para infundir temor a nadie”.

Oneto rechazó la imputación de instigación porque sería necesario que el delito que se incentiva esté “determinado”, y es claro que “buscar” a alguien no es un delito, mucho menos determinado.

En cuanto a la intimidación pública sostuvo que no existe porque esta figura exige que se hayan dado voces de alarma o amenazas de cometer otro delito que ponga en riesgo de un peligro común.

Ante el proyecto de eliminación de la figura del femicidio, el abogado de Milei declaró a A24.com que no se puede castigar con mayor severidad el crimen de una mujer al de un hombre, porque sería un caso de desigualdad ante la ley, dejando en evidencia que se da más valor a la vida de la mujer que a la del varón.