Milei apela a que siga bajando la inflación y en Casa Rosada relativizan el impacto del aumento de tarifas de servicios públicos y combustibles en la pobreza. "La política es clara", dijo Adorni a A24.com.
El vocero presidencial, Manuel Adorni respondió a A24.com sobre el impacto del aumento de tarifas en la inflación. Foto: Archivo.
Este miércoles, el INDEC dará a conocer el índice de inflación de julio. En el entorno del presidente Javier Milei esperan que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) del mes pasado siga siendo a la baja, como en meses anteriores y que "empiece con el número 3", dijo una fuente de la Casa Rosada consultada por A24.com.
En tanto, el vocero presidencial, Manuel Adorni dijo que "hay que esperar a mañana a las 16 horas que se conozca el índice del INDEC" y ratificó que para el Gobierno "desde lo técnico es un tema que está terminado porque hicimos todo lo que había que hacer para solucionarla".
Consultado por A24.com en conferencia de prensa en Casa Rosada, el vocero presidencial dejó en claro que al gobierno le preocupa más sostener la política de sinceramiento de tarifas que el impacto que esos aumentos de servicios públicos tengan en la caída del consumo, la recesión y el aumento de la pobreza (50%).
Sin embargo, no descartó el impacto de la eliminación de subsidios a la electricidad, el gas, el transporte y los combustibles, en una momentánea suba eventual de la inflación.
"El camino es claro, independientemente de que julio pueda dar un número similar más bajo o más alto que el del mes pasado (4,6% de junio), pero lo que está claro es que las condiciones están dadas para que la inflación en Argentina desaparezca", afirmó en conferencia de prensa con periodistas acreditados en Casa Rosada.
Ante la pregunta sobre si en el índice oficial están reflejados los aumentos de tarifas, que se repitieron en los últimos meses, con boletas con montos que se multiplican por 3 o 4 veces más caras que el mes anterior, con montos de entre 50.000 a 100.000 pesos que en muchos casos los vecinos tendrían problemas para pagar por los bajos salarios, Adorni evitó opinar sobre la "metodología técnica" que aplica e INDEC a la hora de ponderar el impacto de las tarifas en el IPC.
Reconoció que "varios periodistas lo han preguntado en otras oportunidades" y admitió que "en algún mes que ha subido alguna tarifa de servicios o prepagas u otra cuestión, está claro que sí, por supuesto, algún aumento en esos precios (de tarifas) impacta en el promedio".
Sin embargo, lo contextualizó en una cuestión "netamente matemática" y explicó que "en el índice de inflación, cada uno de los bienes y servicios tiene una ponderación determinada".
Finalmente, Adorni respondió que "lo que queda es tiempo para ver como esa inflación va a derrumbarse", y remarcó que desde que asumió Milei la inflación tuvo alzas en diciembre y después empezó un camino a la baja, que esperan siga evolucionando hasta llegar a cero. "Esperamos los próximos meses vuelva a bajar otro escalón importante y llegar a la inflación cero que es lo que todos queremos", reiteró el vocero de Milei al término de la reunión de gabinete nacional en la Casa Rosada.
En tanto, prefirió no adelantar el número de julio.
El Indice de inflación de junio pasado fue según el INDEC, del 4,6 %, y el gobierno lo celebró como un signo de consolidación de un camino hacia la desaceleración de los aumentos de precios, pero ahora admite que podría ralentizarse ese descenso, en medio a los permanentes aumentos de tarifas, que se esperan entre agosto y septiembre hasta terminar de eliminar los subsidios del Estado nacional en las boletas que pagan los usuarios, incluidos los boletos de transporte.
En ese marco, desde la Casa Rosada reconocen no tener ninguna previsión de anuncio de medidas concretas para aquellos usuarios que no puedan afrontar el pago de las subas de tarifas de servicios públicos.
Todo en medio de la abrupta caída de la actividad económica y del consumo registrada en los primeros 6 meses del gobierno. Y con un aumento de la pobreza que trepó al 50% de los argentinos, cuyos ingresos no alcanzan para cubrir las necesidades básicas y un incremento, aunque no tan notable, de la desocupación.