Lula y Milei todavía no han mantenido ninguna reunión bilateral, algo inusual desde que ambos países recuperaron el Estado de derecho (Argentina en 1983 y Brasil en 1995). El presidente brasileño aprovechó la situación para reseñar la presunta presencia de activistas brasileños que intentaron dar un golpe de Estado apenas asumió su actual mandato.
Lula y la exigencia de una disculpas
La tajante definición del presidente brasileño llegó cuando hablaba de los golpistas prófugos que están en la Argentina. La periodista le recordó que hasta hoy, los mandatarios no se encontraron a solas y entonces, Lula dio esa definición. Enseguida dijo que le gusta nuestro país y dejó otra frase contundente: "No es un presidente de la República quien va a crear un lío entre Brasil y Argentina. El pueblo argentino y el pueblo brasileño son más grandes que los presidentes. Y ambos quieren vivir en paz".
También se refirió, sin nombrarlo específicamente, al papel que parece estar queriendo jugar Milei como referente de la derecha a nivel mundial. "Si el presidente de Argentina gobierna a su país, ya es lo suficientemente bueno. Que no intente gobernar al mundo", remarcó Lula da Silva.
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¿Casualidad? En la cumbre del G7 en Italia, Lula y Milei fueron invitados por Georgia Meloni. Pero en la "foto de familia", estaba cada uno en un extremo (Foto: G7).
El caso de los golpistas prófugos en la Argentina y Uruguay
Lula dijo que hay casos diferentes entre los 68 brasileños acusados de golpismo por los hechos en Brasilia del 8 de enero de 2023. Huyeron a Uruguay y a la Argentina. El presidente de Brasil explicó que muchos de ellos ya fueron condenados por la Justicia. Por lo tanto, si no quieren regresar, señaló, "que se queden en la Argentina hasta cumplir su pena". Para los que todavía tienen pendiente un juicio, está en marcha un proceso diplomático con el palacio San Martín.
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Lula da Silva, en la entrevista en la que pidió que Javier Milei se disculpe con él y con Brasil (Foto: captura de TV).
La situación de los golpistas, si son aceptados como "refugiados" por la Argentina, representarán un duro escollo para la relación bilateral. De todas maneras, en la entrevista, Lula intentó dejar a salvo los intereses de cooperación entre los dos a países.
Al margen de las divergencias entre ambos, Lula y Milei tienen un encuentro fijado para fines de este año: en noviembre, Río de Janeiro será la sede del encuentro del G20.