Según Osuna, el delito que se les imputa es uno de los más repudiados entre los reclusos, y esta situación convirtió la vida de los acusados en un infierno.
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Antonio Benítez, uno de los detenidos por la desaparición de Loan (Foto: archivo).
"Los siete detenidos la están pasando mal en las cárceles", reveló el abogado, haciendo énfasis en que no se trata solo de Antonio Benítez, sino de todos los acusados que están en prisión por este caso.
Osuna detalló que los internos no toleran este tipo de crímenes, y que desde el primer momento en que Benítez fue trasladado a la cárcel, fue objeto de agresiones físicas y psicológicas. "El delito que se les imputa está muy mal visto entre los presos", recalcó, aludiendo al hecho de que en el código interno de las cárceles, los delitos contra los niños son considerados como los peores.
Esta situación generó un ambiente de extrema tensión para Benítez, a tal punto de temer por su vida.