Un reciente informe elaborado por científicos de distintas universidades latinoamericanas encendió las alarmas: la cordillera de los Andes, una de las formaciones montañosas más extensas y biodiversas del planeta, está atravesando un proceso de transformación crítica. El calentamiento global, sumado a la actividad humana, estaría acelerando fenómenos que podrían tener consecuencias sociales, ambientales y económicas a gran escala.