Tras quedar en libertad bajo fianza en octubre, fue encarcelado de nuevo al ser condenado por un tribunal revolucionario de Teherán en enero a un total de dos años y ocho meses de prisión y 74 latigazos por varios cargos, incluido el de "alteración del orden público".
Desde la Revolución Islámica de 1979, el uso del velo es obligatorio en Irán para todas las mujeres, aunque sean extranjeras.
Sin embargo, desde entonces existen casos de mujeres que llevan a cabo actos de desobediencia respecto al uso del velo.
Un hito reciente de esas respuestas contestatarias se produjo luego de que el 16 de septiembre de 2022 se conociera la muerte de la joven kurda Mahsa Amini, de 22 años, tres días después de haber sido detenida por la policía por llevar supuestamente mal colocado su velo islámico.
La detención y muerte de Amini en Teherán desencadenó una gigantesca ola de manifestaciones contra los dirigentes políticos y religiosos iraníes.
La severa represión de estas protestas provocó la muerte de cientos de personas y miles de arrestos, entre ellos, familiares de Amini.
En tanto, la ganadora del Nobel de la Paz en 2023, Narges Mohammadi, fue reiteradamente condenada y encarcelada en los últimos 25 años por su militancia en rechazo al uso del velo obligatorio para las mujeres y de la pena de muerte.
Además, ha liderado huelgas de hambre junto a otras mujeres en la cárcel de Evin, en Teherán, la capital iraní.
En septiembre de 2023, el Parlamento votó a favor de un proyecto de ley para endurecer las sanciones y castigos contra las mujeres y niñas que violen el estricto código de vestimenta en el país, incluida la obligatoriedad del uso del velo.
El proyecto de ley fue tildado de "apartheid de género" por expertos de Naciones Unidas.