No importa que se cumplan 30 años hoy. De aquel 8 de julio de 1990 a hoy la final del Mundial de Italia 1990 sigue teniendo la misma polémica. La derrota ante Alemania por 1 a 0 por el penal convertido por Andreas Brehme a los 85 minutos ,luego de una falta que para la gran mayoría no fue pero sí para quien determinaba las sanciones del juego, el árbitro mexicano Edgardo Codesal que hoy, en otro aniversario de esa noche en el Olímpico de Roma aseguró: "Volvería a cobrar lo mismo".