En Cataluña, en el noreste del país, un centenar de tractores mantuvo bloqueado durante horas un tramo de la autopista AP-7 que une España y Francia, a la altura de Pontós, en Girona, como ya hicieron ayer.
La Unió de Pagesos, el sindicato mayoritario del campo en Cataluña, indicó en la red social X que el Ministerio de Agricultura aceptó sostener una reunión el 23 de este mes en Barcelona y advirtió que si los agricultores no obtienen respuestas a sus demandas, seguirán movilizados.
Al igual que sus colegas en otros países europeos que también se manifestaron recientemente, los agricultores españoles se quejan de la burocracia y complejidad de las normas europeas, así como de los precios bajos a los que venden sus productos y de la competencia de los artículos extranjeros.
Ante un descontento que no cesa, el ministro de Agricultura, Luis Planas, tenía previsto reunirse con los representantes de la cadena alimentaria.
En este contexto, Planas recibirá mañana a los principales sindicatos de agricultores y ganaderos (Asaja, COAG y UPA).
Las tres organizaciones tienen previstas dos manifestación en Madrid, una el 21 de febrero frente al Ministerio de Agricultura, y otra el 26, cuando la Unión Europea (UE) celebrará un consejo de ministros de Agricultura.
En su comunicado, estos tres sindicatos consideraron que los responsables de Agricultura deben "actuar con urgencia y aprobar reformas en materia de cadena alimentaria, de acuerdos comerciales con terceros países, de simplificación burocrática y de flexibilización de la PAC".
España, a menudo descrita como la "huerta de Europa", es el primer exportador europeo de frutas y hortalizas pero su sector agrario atraviesa dificultades, debido sobre todo a la sequía que asola el país desde hace tres años.