Mercurio en trígono con Neptuno en la astrología trae inspiración, intuición y mensajes que llegan en forma de susurros. ¿Y si la respuesta ya la soñaste?
Mercurio en trígono con Neptuno: el pensamiento se disuelve en emoción y aparece la verdad interna. Foto: Astrología/Ideogram.
Este tránsito de Mercurio en trígono con Neptuno no grita, susurra. No te empuja, te inspira. No te obliga a decidir, te invita a sentir. Por eso, más que un momento para tomar decisiones lógicas, es un tiempo ideal para dejarse llevar por lo que aparece “sin buscarlo”: una imagen que se repite en sueños, una frase que escuchás en la calle y te deja pensando, una canción que parece escrita para vos.
Mercurio representa la mente racional, la palabra, la comunicación. Neptuno, en cambio, es el océano profundo de lo simbólico, lo espiritual y lo artístico. Cuando están en armonía, como ahora, pueden abrir canales de conexión entre lo que pensás y lo que sentís… aunque todavía no lo puedas explicar.
Este Mercurio en trígono con Neptuno es una brújula emocional. No te va a señalar el camino con GPS, pero sí con señales sutiles que vas a entender si te tomás un momento de silencio, si bajás el ruido mental y te dejás llevar.
Muchos están sintiendo más sensibilidad, sueños vívidos, ganas de escribir, dibujar, hablar desde otro lugar. También puede que aparezca nostalgia, deseo de reencontrarte con partes tuyas que estaban dormidas. Es normal.
La energía de Neptuno puede confundirnos si intentamos forzar claridad. Pero si la dejamos actuar como inspiración, puede ser el canal perfecto para escribir un mensaje pendiente, tener una charla sanadora o hacer algo artístico que no te animabas.
¿Te preguntás qué significa lo que soñaste anoche? ¿Volvió a tu cabeza esa idea vieja que creías cerrada? Prestá atención. Tal vez este tránsito te está dando respuestas que no habías querido escuchar.
Este es un buen momento para escribir. No importa si es un diario íntimo, un poema o un mensaje de WhatsApp que tenés guardado en borradores. Mercurio y Neptuno juntos invitan a expresar desde el alma, no desde el ego.
También es una energía excelente para meditar, descansar más, dejar que las emociones hablen. Las decisiones no se toman solo con lógica: a veces, lo más claro se siente antes de entenderse.
Piscis:
Te sentís más vos que nunca. Tu mundo interno florece, pero ojo: no te ahogues en él. Lo que sentís también quiere ser compartido.
Cáncer:
Este tránsito puede traerte sanación. Una conversación con alguien del pasado, una carta, una canción… Todo puede ser medicina si estás dispuesto a sentirlo.
Virgo:
Aunque amás el orden, dejá que algo desborde. Este trígono te invita a soltar el control y confiar en que lo intangible también es información.
Escorpio:
Te volvés más intuitivo que nunca. Aprovechá esta energía para conectar con lo espiritual, con tus emociones más profundas o con alguien que tenías lejos.
Géminis:
Tu mente vuela y eso es maravilloso si sabés usarlo para crear. Ideal para proyectos artísticos, escribir o tener esa charla pendiente.
¿Qué es un trígono en astrología?
Es un aspecto armónico entre planetas. En este caso, Mercurio y Neptuno fluyen con facilidad, generando momentos de inspiración y sensibilidad.
¿Cómo impacta Mercurio en trígono con Neptuno?
Facilita la expresión creativa, la conexión emocional, los sueños vívidos y las charlas profundas. Ideal para meditar, escribir o sanar vínculos.
¿Qué emociones puede despertar este tránsito?
Nostalgia, inspiración, deseo de reconexión y una fuerte percepción intuitiva. También sensibilidad, ganas de hablar desde el corazón o de perdonar.
