Repetto fue todavía más allá al describir el fenómeno como algo naturalizado dentro del ámbito escolar: "Escuchado decir ‘perdés el buzo, andá y agarrate otro de otro pibe’. ¿Cómo? ¿Perdón?”.
"Una botellita cheta, desaparecida. Una medio pelo, esa sobrevive años"
En su relato, la actriz no solo mostró enojo por la falta de control del colegio ante estos episodios, sino que también ironizó sobre el destino de las pertenencias robadas: “Mandás una marca chorga y la tenés desde primer grado. Mandás una Stanley o algo más caro, no vuelve ni en sueños. Magia”.
Este nuevo escándalo deja al descubierto una realidad que, aunque parezca menor, revela una falta de organización, control y comunicación entre padres y escuelas. Muchos usuarios en redes comenzaron a cuestionar el costo de la cuota escolar frente a la falta de respuesta por estas pérdidas: “Pagamos una fortuna y no hay nadie que supervise qué entra y qué sale”.