El tercer juicio por el caso se iniciará en el medio de un pleito entre los jueces y los fiscales, ya que el mes pasado los miembros del Ministerio Público Fiscal (MPF) de San isidro que participarán del debate recusaron al tribunal por su presunta "pérdida de imparcialidad" y pidieron una serie de nulidades, con el objetivo de que se suspenda el juicio con estos jueces.
La Sala I de la Cámara de Apelaciones de San Isidro emitió una resolución al respecto, pero resolvió que sean los jueces de los tribunales orales que nunca participaron del caso quienes definan o no la recusación de sus pares, con lo cual los fiscales esperan la intervención del Tribunal de Casación.
Según los voceros, hoy se debatirá finalmente la nueva fecha para el inicio del juicio, que debía comenzar el pasado 1 de junio pero se postergó debido a que uno de los tres miembros del TOC 4 –integrado por los jueces Osvaldo Rossi, Federico Ecke y Esteban Andrejin-, se contagió de Covid-19.
En la audiencia, las partes acordarán con los jueces otras cuestiones organizativas, como la forma de participación de los imputados, el modo en que se recibirá la prueba testimonial y la estimación de la duración de las jornadas.
Un misterio sin resolver: ¿cómo mataron a María Marta García Belsunce?
María Marta García Belsunce tenía 50 años cuando fue hallada muerta el 27 de octubre de 2002 en su chalet del country Carmel de Pilar, con su cuerpo semisumergido en la bañera. Su marido, Carlos Carrascosa -primer condenado y luego absuelto por el caso- declaró siempre que él pensó que había sufrido un "accidente" y se había golpeado la cabeza contra una viga del techo y las canillas.
Los fiscales Andrés Quintana y Matías López Vidal intentarán demostrar en este nuevo juicio -el tercero- la acusación por "robo agravado por el uso de arma en concurso real con homicidio criminis causa agravado" que pesa sobre Pachelo y los dos ex vigiladores y que prevé la pena de prisión perpetua.
Para los fiscales, el 27 de octubre de 2002 María Marta fue ejecutada a balazos cuando sorprendió a ladrones adentro de su casa.
La clave de la imputación fue la nueva hora del asesinato fijada a las 18.30 por un forense y que ubicó ese día a Pachelo en Carmel entre las 17.34 y las 18.59, cuando se retiró 29 minutos después de cometido el homicidio.