La denuncia que encendió la alarma
Era inusual que Facundo no respondiera a los mensajes ni apareciera en línea. Fue esa ausencia lo que llevó a su pareja a alertar a las fuerzas de seguridad. Con su autorización, personal policial acudió a la vivienda ubicada en José Hernández al 400. Golpearon la puerta reiteradas veces. No hubo respuesta. Finalmente, decidieron forzar la entrada.
Lo que encontraron fue desolador. El cuerpo de Facundo yacía en el piso de su departamento. De inmediato, los efectivos convocaron al Sistema Integral de Atención Rionegrina de Medicina de Emergencias (Siarme). Sin embargo, el personal médico no pudo hacer más que confirmar lo peor: Facundo Taux no tenía signos vitales.
La autopsia y las primeras conclusiones médicas
Una médica de Siarme fue quien, en primera instancia, determinó la causa del fallecimiento: paro cardiorrespiratorio no traumático. Esto quiere decir que no había signos de violencia visibles en el cuerpo. No obstante, el protocolo médico y judicial estableció que se debía realizar una autopsia completa para confirmar los motivos del deceso.
Horas más tarde, el médico forense se presentó para realizar el procedimiento y analizar el cuerpo en detalle. Aunque aún no se ha difundido un informe final, las primeras evaluaciones apuntan a un fallo cardíaco repentino. La autopsia busca descartar cualquier otro factor, como una intoxicación o alguna enfermedad no diagnosticada.
El dato previo que podría haber cambiado todo
La mención del dolor en el pecho que Facundo expresó horas antes de morir es, hasta ahora, el único indicio de que su cuerpo dio una señal de alerta. Según la información recabada, no se trató de un síntoma al que él o su entorno le otorgaran gravedad. No acudió a un centro médico ni solicitó ayuda.
Este tipo de situaciones no son inusuales en adultos jóvenes sin antecedentes clínicos. Según datos de la Sociedad Argentina de Cardiología, uno de cada diez infartos en personas menores de 35 años ocurre sin señales previas contundentes. La muerte súbita por causas cardíacas, especialmente en varones jóvenes, suele estar relacionada con miocardiopatías congénitas o anomalías eléctricas no detectadas.
Una comunidad universitaria de luto
La noticia del fallecimiento de Facundo impactó de lleno en la Universidad Nacional de Río Negro. Al conocerse el hecho, la institución emitió un comunicado oficial expresando su pesar. "El rector de la Universidad Nacional de Río Negro, Anselmo Torres; el vicerrector de la Sede Atlántica UNRN, Daniel Barrio, autoridades y comunidad educativa acompañan con tristeza a la familia y amigos de nuestro estudiante de Kinesiología y Fisiatría en este doloroso momento", se publicó a través de las redes sociales institucionales.
Compañeros de cursada, docentes y autoridades lo recordaron como un joven aplicado, comprometido con su carrera y de carácter afable. Su muerte dejó una huella difícil de dimensionar en quienes compartían con él el día a día académico.
El barrio en silencio y la conmoción en Chubut
Facundo era oriundo de El Maitén, Chubut, un pueblo de poco más de cuatro mil habitantes en la cordillera patagónica. Allí también la noticia corrió rápido. Vecinos y conocidos lo despidieron con mensajes sentidos en redes sociales, destacando su calidez humana y la promesa que representaba su camino profesional.
En el barrio San Martín de Viedma, donde vivía desde que se mudó para estudiar, también reinaba el desconcierto. Nadie había escuchado nada extraño. El departamento, según detallaron los efectivos, estaba en orden. No había señales de desorden ni de violencia.
Lo que queda por esclarecer
La autopsia será determinante para confirmar si el paro cardiorrespiratorio fue provocado por una afección congénita, una arritmia o algún otro factor silencioso. También se busca determinar si hubo algún elemento externo que haya influido. No se descarta que pueda haberse tratado de una condición médica no diagnosticada, como una miocardiopatía hipertrófica, una de las causas más frecuentes de muerte súbita en jóvenes.
Las autoridades judiciales siguen recopilando información para cerrar el expediente sin dejar cabos sueltos. Aunque la hipótesis principal es que se trató de una muerte súbita no violenta, los protocolos requieren exhaustividad.
La alerta médica para jóvenes sin antecedentes
Este caso reabre una discusión importante: ¿cuánto debemos atender los síntomas menores, incluso si no tenemos antecedentes de salud? El dolor de pecho en jóvenes es, muchas veces, atribuido a estrés o ansiedad. Pero los especialistas advierten que incluso en personas de entre 18 y 30 años, se deben considerar estudios cardiológicos preventivos si hay síntomas reiterados o antecedentes familiares.
En el caso de Facundo, una sola molestia bastó para marcar el destino. No hubo tiempo para consultas médicas, análisis ni tratamientos. Solo quedó el impacto de una vida joven que se apagó en silencio, sin que nadie pudiera anticiparlo.