El niño fue alcanzado por una bala en medio de un enfrentamiento entre un policía y delincuentes. Su papá lo recordó con un mensaje conmovedor y una imagen del club donde jugaba al fútbol.
Fabián Correa despidió con profundo dolor a su hijo Thiago, de 7 años, quien murió tras recibir un disparo en la cabeza durante un tiroteo entre un policía y un grupo de delincuentes en La Tablada. El niño había quedado internado en el Hospital de Niños de San Justo, pero falleció el viernes por la noche luego de que se confirmara que sufría muerte cerebral.
“Estoy destrozado, me dejaste hijito mío, te amo y te voy a amar toda la vida. Ahora sos mi angelito”, escribió Fabián en sus redes sociales, junto a una imagen de su hijo con la camiseta del club Defensores Unidos, donde jugaba al fútbol.
El trágico episodio ocurrió el miércoles por la noche en la intersección de las calles Crovara y Madrid, cuando padre e hijo esperaban el colectivo para que el chico regresara a la casa de su mamá. Minutos antes, Thiago había pasado el día entre la escuela, el entrenamiento en su club y una cena con su papá.
En el mismo lugar, un agente de la Policía Federal Argentina que se encontraba de civil fue abordado por cuatro delincuentes armados. En su intento por repeler el robo, el policía, identificado como Facundo Daniel Aguilar Fajardo, de 21 años, sacó su arma reglamentaria, se identificó y comenzó a disparar. En medio del tiroteo, uno de los disparos impactó a Thiago en la parte trasera de la cabeza.
“Cuando le da el impacto y lo tengo en mis brazos, me dice ‘pá’ y ya no dijo más nada”, relató Fabián entre lágrimas. “Siete años tiene Thiago, toda una vida por delante. No puedo creer lo que me está pasando, es una pesadilla”.
El oficial fue detenido acusado de homicidio en exceso en la legítima defensa. Por el hecho, uno de los delincuentes murió y otros dos resultaron heridos. En tanto, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, responsabilizó a los atacantes por lo sucedido: “Los responsables directos de la situación que atraviesa Thiago son los delincuentes”.
La comunidad del Club Defensores Unidos de La Tablada, donde jugaba Thiago, suspendió todas sus actividades deportivas en señal de duelo. Sus compañeros, entrenadores y vecinos lo recuerdan como “un amor, muy amiguero, una persona querida”.
