La Jungla del Poder

Las tres noticias que condicionan el mapa político y las últimas encuestas antes de la elección porteña

A horas de los comicios en la Ciudad hay nervios en los principales campamentos de campaña. Un dato clave puede influir en el resultado. La pelea precios vs. salarios.

Pablo Winokur
por Pablo Winokur |
Javier Milei

Javier Milei, durante una conferencia de negocios (Foto: archivo).

El Gobierno de Milei se juega esta semana tres paradas importantes que pueden condicionar todo el año electoral: el INDEC publica el miércoles el índice de inflación de abril; el domingo son las elecciones porteñas, y las encuestas están jugando fuerte y como nunca. A eso se suma que este domingo hay elecciones en 4 provincias. Está claro que a La Libertad Avanza le va a ir mal, pero hay algunos detalles que pueden permitir olfatear cómo va a seguir el mapa electoral.

El miércoles a las 16 se publica la inflación del INDEC de abril. El mes pasado se había disparado a 3,7% y todo indicaba que la de abril iba a ser peor por cómo se habían movido los precios los primeros días y por la devaluación del tipo de cambio. Pero en la última quincena, algo cambió y los precios se estabilizaron.

El Gobierno está confiado con que dé por debajo de la medición anterior: hablan de 2 y pico. El REM del Banco Central (que toma un promedio de consultoras privadas) dio 3,2%. El lunes, además, se publica la inflación de la Ciudad, que viene dando más alta que la nacional.

Más allá de que esto habla de la efectividad del Gobierno, el dato puede tener un impacto en las elecciones porteñas de este domingo. Habla de la efectividad y la eficacia de Milei a la hora de implementar sus políticas. Su principal mandato es bajar la inflación y su popularidad crece o cae en función de cómo evolucionan los precios. Por lo menos es lo que dicen las encuestas.

¿Qué dicen las encuestas para la elección porteña?

No voy a enumerar una por una las que están dando vueltas para no aburrir. Pido que confíen en mí los que siguen esta columna hace años. Y recordar que las encuestas ya no son una herramienta confiable para predecir resultados, menos una semana antes y menos que menos en una elección que no le importa a nadie.

La mayoría de las encuestas, cuando se pregunta por espacio político, le dan primero a La Libertad Avanza y segundo al kirchnerismo. Mucho más atrás el PRO. Larreta desaparece.

Cuando se pregunta por candidato, la cosa cambia. La mayoría le da primero a Leando Santoro por poco margen, después Manuel Adorni y atrás Silvia Lospenatto. Aunque en los últimos días viene creciendo Larreta. Incluso, Opinaia, que trabaja para el Gobierno, lo ubica en un empate con Lospenatto.

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Un encuestador que viene siguiendo de cerca la evolución de Horacio relata que apareció un problema a la hora de medir: la gente no sabe que Larreta se fue del PRO y muchos no conocen a Lospenatto. Una luz amarilla para el partido amarillo.

Algo parecido pasa con Marra: ¿cuántos saben que fue expulsado de La Libertad Avanza?

Todo varía según cómo se pregunte y por eso el resultado es impredecible. Santoro como kirchnerista mide poco. Pero su logo y sus colores no tienen nada que ver con el kirchnerismo.

Para sumar al caos generalizado, esta vez se va a votar por primera vez en una maquinita en elecciones generales sin PASO.

Cuando la gente entre al cuarto oscuro va a tener una pantalla con 17 opciones de caras y logos que no conoce que van a estar distribuidas aleatoriamente, o eso dicen en la computadora. ¿Cómo va a influir eso? No sabemos. La campaña para difundir cómo se vota fue escasa.

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La difusión de las encuestas tiene una intencionalidad. La consultora Proyección preguntó cuánto estaría dispuesta la gente a cambiar su voto en CABA para evitar que gane el kirchnerismo.

  • Seguramente lo cambiaría → 44,2%
  • Sería probable que lo cambie → 7,8%
  • No creo que cambie mi voto → 15,8%
  • No cambiaría mi voto → 32,1%

Si Adorni está segundo detrás de Santoro, aquel que quiera evitar que gane el kirchnerismo sabe a quién tiene que votar.

Jorge Macri salió a aclarar que el resultado no le cambia la gobernabilidad en la Ciudad de Buenos Aires.

De los 6 legisladores que pone en juego el oficialismo porteño, solo 2 son del PRO puro: hay dos de Larreta y dos de Carrió, que ya tienen un pie afuera. Los otros que habían entrado en 2021 con la lista de Juntos por el Cambio ya se fueron a otros espacios antes.

Haciendo 20 puntos, Jorge podría tener unas 6 o 7 bancas y decir que no cosechó un mal resultado y que incluso va a ganar legisladores.

Pero la idea de una elección local es una simplificación. Ahora se empieza a jugar en serio la nacional porque funciona como una interna abierta de la centroderecha o del panoficialismo.

El resultado de esta pelea va a enmarcar cómo se van a discutir las alianzas en la provincia de Buenos Aires y en las listas nacionales. ¿El PRO tiene volumen propio para competir por su cuenta? ¿Las banderas de “transparencia y República” que siempre enarboló el PRO, siguen vigentes? ¿Qué arrastre tiene la figura de Macri?

En concreto, si al PRO le va muy mal en su propio territorio, no solo se queda sin poder de negociación para los comicios que vienen, sino que sus propios dirigentes van a empezar a pedir el pase a LLA.

Aunque para eso, además de ganarle al PRO, Adorni tiene que hacer una buena elección.

Problemas de bolsillo

Mientras se espera cómo dan los índices de inflación, este martes se va a publicar otro número importante, que es la evolución de los salarios de marzo. Como se contó la semana pasada en #LaJungla, los ingresos se vienen amesetando. Recuperaron lo perdido en 2024, pero no hay ningún indicio de que vayan a recomponer lo que perdieron en 2022 y 2023.

Según un dato que se conoció esta semana, en la Ciudad el promedio de ingresos de una ocupación “principal” es $983.402. Ganando 1 millón de pesos es considerada pobre.

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Un informe del Centro de Capacitación y Estudios sobre el Trabajo y el Desarrollo (CETyD) de la Universidad de San Martín advierte que el aumento de los ingresos en los hogares no se está dando solo por la recuperación de los salarios, sino porque cada trabajador aumentó un 5% las horas que trabaja. “Si se excluye el crecimiento de las horas extra y se observa lo ocurrido con el salario por hora trabajada, el incremento fue sustancialmente menor (el salario total creció 7% y el salario horario, 2%)”, dice el trabajo.

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Esta semana, el Gobierno blanqueó que las paritarias están topeadas: es decir, que hay un techo para el aumento de los sueldos en la Argentina, que lo marca el propio Gobierno.

Primero lo explicitó con el paro de colectivos, cuando dijo que el aumento que pedían los choferes “supera ampliamente las pautas salariales de Gobierno”. A última hora del viernes, pidió formalmente la reapertura de las paritarias de empleados de Comercio, que habían acordado un aumento del 5,4% en el trimestre abril-junio; el Gobierno quiere que sea 1% mensual. Muy por debajo de la inflación, que ya dejó de ser un fenómeno netamente monetario.

En una conferencia sobre negocios de esta semana, en la que participaron Milei y Caputo, aclararon que no va a haber “remonetización” de la economía: no van a aumentar el circulante de pesos si el dólar no toca “el piso de la banda”. Por eso, la única manera de que haya más pesos dando vueltas es que la gente saque los dólares de abajo del colchón, lo que ayudaría a “mantener el nivel de crecimiento”.

En las próximas horas se va a anunciar una medida en ese sentido. Va a ser un blanqueo 2, pero mucho más agresivo y sin pasar por el Congreso. Habrá que ver si funciona y cómo eso derrame en la economía general.

La gran incógnita es cómo van a impactar los ingresos pisados sobre el mapa electoral. ¿Están llegando adecuadamente las encuestas a ese sector de la población que peor la está pasando? Hay algunos estudios que indican que no. En una semana lo sabremos.

Las cuatro elecciones de este domingo

Chaco, Salta, Jujuy y San Luis votan este domingo. El panorama para el oficialismo es distinto en cada una.

  • En Chaco fueron con alianza con el radicalismo local. Le va a ir bien porque no juega su sello propio.
  • En Jujuy, los libertarios fueron solos. A Milei le va muy bien en esa provincia. Esperan por lo menos salir segundos, con el peronismo destruido.
  • En Salta, el oficialismo domina todo. No le va a ir bien a la Libertad Avanza.
  • En San Luis ni presenta candidatos.

Son elecciones locales que tienen cero peso en el mapa nacional. Pero sí van a servir como muestra de laboratorio de cómo la política de alianzas puede inducir un resultado u otro. No cambian en nada en el mapa global de la política argentina, aunque pueden tener peso en la interna libertaria sobre cómo se debería armar el partido de cara a octubre.

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