En medio de una decoración temática de Minnie Mouse, la madre irrumpió en la pista de baile y desató una serie de movimientos sugestivos que no pasaron desapercibidos para nadie. A pesar de que algunos invitados reaccionaron con risas y otros decidieron grabar la escena, a la mujer de 26 años no le importó y, de hecho, llegó a bailar sobre una mesa, luciendo su vestido transparente sin mostrar inhibición alguna.
La situación generó una ola de críticas hacia la madre en cuestión, Brenna Azevedo, quien decidió defenderse a través de otro video publicado en TikTok. Azevedo, residente en Río de Janeiro, expresó su desconcierto ante las críticas recibidas y se defendió de los ataques.
"La gente está indignada porque estaba bailando con un vestido transparente. Me están atacando, maldiciendo y amenazando con denunciarme al Consejo Tutelar. Yo no veo nada de malo en eso. He visto cosas peores", declaró Azevedo en su video.
Además, compartió su consternación al ver cómo las personas se lastiman mutuamente en las redes sociales, recibiendo mensajes ofensivos y horribles. Azevedo aseguró que su hija estaba feliz durante la celebración y que a los invitados les había gustado su actuación.
En sus declaraciones frente a la cámara, Azevedo reveló que había consumido una considerable cantidad de alcohol en el momento en que se desencadenaron los acontecimientos, debido a la felicidad que sentía por poder celebrar el cumpleaños de su hija. La madre afirmó que había dedicado dos meses de esfuerzo, sacrificio y cariño para organizar la fiesta. Además, hizo hincapié en que su hija era su responsabilidad, el dinero invertido era suyo y su cuerpo le pertenecía, reafirmando su derecho a hacer lo que quisiera con su vida.
La reacción de la madre generó una división de opiniones entre aquellos que la apoyaron en su derecho a vivir su vida según sus propios términos y aquellos que cuestionaron su conducta y su impacto en la niña. Azevedo también señaló el doble rasero de la sociedad al criticar su baile mientras famosos realizan acciones aún más cuestionables, como maltratar a las mujeres o exhibirse de manera provocativa en las redes sociales.
Finalmente, Azevedo agradeció los mensajes de apoyo que recibió y dejó claro que no se arrepentía de su actuación. Instó a las personas a vivir su vida, a ser felices y a no permitir que los comentarios negativos las opriman. Concluyó su mensaje llamando a aquellos que continúan criticándola a liberarse de sus propias restricciones y a disfrutar plenamente de la vida.