A mediados de los años ‘80 salió un juego desde las entrañas de una Unión Soviética que se lo colgó como una medalla dentro de la Guerra Fría. En 1984 Alexey Leonidovich Pazhitnov, un investigador de inteligencia artificial de la Academia de Ciencias soviética de Moscú se inspiró en el Pentaminó, un juego de destreza mental tradicional en su nación.