En su intento de fuga, el sospechoso ingresó a otra casa en la misma cuadra, donde sorprendió a una segunda mujer en su dormitorio. Según su relato, el atacante le tapó la boca y la amenazó: “Me dijo que no gritara porque me hacía boleta”.
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Con notable sangre fría, la mujer -que se encontraba en ropa interior- intentó calmarlo. Le ofreció comida, bebida e incluso encendió el televisor para distraerlo. “Le pregunté si había visto El Eternauta y le ofrecí mirar Netflix”, contó más tarde en un mensaje de audio que se viralizó entre los vecinos.
En esa conversación, el agresor le dijo que robaba porque su madre tenía leucemia y no conseguía trabajo debido a sus antecedentes penales. La víctima aprovechó ese momento para idear un plan: le propuso bajar juntos como si ella fuera su madre y lo llevara al médico. El joven accedió.
Ambos caminaron abrazados durante una cuadra y media hasta que un patrullero de la Policía de Santa Fe los interceptó en 1° de Mayo y Obispo Gelabert. El móvil 11446 ya patrullaba la zona por el primer llamado de alerta. En poder del agresor hallaron una notebook robada en la primera vivienda.
El detenido fue trasladado a la comisaría y quedó a disposición de la fiscalía de turno. Según fuentes policiales, el joven tiene 26 años y antecedentes penales.
“Sentí que me iba a violar, pero también sentí que si lo escuchaba podía evitar lo peor”, dijo la víctima. “Le dije que nunca es tarde para cambiar y que no hacerme daño ya era un primer paso”.