Este beneficio busca brindar un sostén financiero durante el período de búsqueda de un nuevo empleo, aliviando la carga económica que implica la pérdida del trabajo. Es una herramienta fundamental para la reinserción laboral y la protección social de los trabajadores.
Este beneficio es exclusivo para aquellos que estaban empleados bajo relación de dependencia y fueron despedidos injustificadamente o finalizaron su vínculo laboral debido a circunstancias fuera de su control, como las siguientes:
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Salario de desempleo de ANSES. (Foto: archivo)
- Conclusión del contrato laboral.
- Bancarrota del empleador.
- Fallecimiento, jubilación o incapacidad del empleador.
Qué requisitos hay que tener para cobrar esta prestación
- Trabajadores permanentes: tener al menos 6 meses de trabajo con aportes en los últimos 3 años anteriores al despido o finalización del contrato.
- Trabajadores eventuales y de temporada: haber trabajado menos de 12 meses en los últimos 3 años y más de 90 días en el último año, antes de la finalización del trabajo.
- Trabajadores de la construcción: Deben tener al menos ocho meses de trabajo.
Montos del beneficio
No hay un monto fijo para cobrar, sino que varía en cada caso. La persona beneficiada recibirá el 75% del importe neto de la mejor remuneración mensual, normal y habitual del trabajador en los seis meses anteriores al quiebre del contrato de trabajo que lo puso en situación de desempleo. A pesar de lo mencionado, esta ayuda tiene montos mínimos y máximos establecidos.
- Monto mínimo: La prestación mensual nunca será inferior al 50% del Salario Mínimo Vital y Móvil vigente, es decir, $117.157,56.
- Monto máximo: No puede superar el 100% del Salario Mínimo Vital y Móvil vigente, que asciende a $234.315,12 desde el mes de mayo de 2024.
También varía dependiendo de los meses trabajados con aportes la cantidad de cuotas. Por ejemplo, los trabajadores mayores de 45 años reciben la prestación durante seis meses adicionales.