El uso de plantas en rituales energéticos es una práctica ancestral que ha perdurado a lo largo de los siglos. Uno de los más populares es el ritual del laurel, una tradición que consiste en quemar hojas de laurel en puntos estratégicos del hogar para limpiar energías negativas y atraer prosperidad y abundancia. Si bien el laurel se asocia comúnmente con la cocina, sus propiedades van más allá, siendo ideal para la purificación de varios espacios del hogar.