Robert Rojas sufrió la fractura de tibia y peroné.
La salud de Robert Rojas generó mucha preocupación en River. Después de sufrir una fractura de tibia y peroné en el partido con Alianza Lima, el jugador paraguayo se operó ayer al mediodía en la Clínica Trinidad de San Isidro. La intervención había sido un éxito y sin complicación. Sin embargo, dos horas después, el defensor sufrió un espasmo coronario que alertó a todo el cuerpo médico.
El episodio cardíaco fue controlado rápidamente y Rojas pasó la noche lúcido y estable. En las próximas horas, los médicos someterán a Rojas a una serie de estudios para poder determinar el verdadero motivo que originó la irregularidad coronaria. Mientras tanto, seguirá bajo estricto monitoreo en la Unidad Coronaria. La intervención quirúrgica la encabezó el médico del plantel de River, Pedro Hansing.
Un espasmo de la arteria coronaria es una contracción temporal de los músculos de la pared de una de las arterias que envían sangre al corazón. Dicha contracción puede disminuir o bloquear completamente el flujo sanguíneo a una parte del corazón.
Si no se controla a tiempo o dura lo suficiente, puede producir un ataque cardíaco (infarto al miocardio) o dolor en el pecho (angina de pecho). A diferencia de la angina típica, que generalmente ocurre con la actividad física, los espasmos de las arterias coronarias a menudo ocurren en reposo, entre la medianoche y la madrugada.
Un espasmo coronario también es conocido a veces como "angina de pecho" y se produce cuando la arteria coronaria, por algún motivo, se contrae y la sangre no puede fluir con normalidad y el paciente registra dolores por debajo del hueso del tórax (esternón) o bien el lado izquierdo. Algunos especialistas lo emparentan con lo que habitualmente se llama "infarto".
