Según explicó, todo comenzó cuando le pidió a su hija que buscara trabajo para colaborar con los gastos del hogar, ya que la situación económica familiar era delicada. La joven respondió a los gritos, visiblemente alterada, y la conversación se tornó rápidamente violenta.
“No supe en qué momento agarró algo para apuñalarme”
En medio de los insultos, la mujer notó que su hija tomó un objeto, aunque no pudo identificarlo en ese momento. Fue entonces cuando, de forma sorpresiva y brutal, la joven la apuñaló en el pecho, causándole un profundo corte.
“No supe en qué momento agarró algo para apuñalarme”, declaró más tarde la víctima, aún en shock. Pero la violencia no terminó ahí.
Tras el apuñalamiento, la agresora le dio un cachetazo en el ojo izquierdo y una fuerte patada en el estómago, lo que provocó que la madre perdiera el equilibrio.
Cayó al suelo y quedó inconsciente
El impacto de la patada la hizo retroceder y tropezar. Según consta en la denuncia, la víctima cayó golpeándose contra la cama y luego con la cabeza contra el suelo. Esa doble caída le provocó la pérdida del conocimiento durante varios minutos.
“Cuando desperté, ya no estaba”, dijo la mujer en su declaración ante la Policía. Aprovechando ese momento de vulnerabilidad, Sabrina escapó de la casa y hasta la noche del lunes seguía prófuga.
A pesar de sus heridas y el estado de conmoción, la madre logró reincorporarse y caminar hasta la comisaría para formalizar la denuncia penal contra su hija.
El avance de la causa: orden de detención
Ante la gravedad de los hechos, la Policía santiagueña inició un operativo de búsqueda inmediata, bajo la coordinación del Ministerio Público Fiscal. La fiscal María del Pilar Gallo, a cargo de la investigación, solicitó a la Justicia de Control y Garantías una orden de detención urgente para la joven.
La causa fue caratulada preliminarmente como “lesiones graves agravadas por el vínculo”, aunque no se descarta que pueda derivar en una acusación por tentativa de homicidio, dependiendo del resultado de los informes médicos.
Analizan cámaras de seguridad
Las autoridades ya comenzaron el análisis de las cámaras de seguridad de la zona para reconstruir el trayecto de fuga de la agresora. También se busca establecer si alguna persona la ayudó a escapar o si recibió asistencia luego de dejar la vivienda.
La Policía, por su parte, realizó un relevamiento de testigos en el barrio y no descarta realizar allanamientos en domicilios cercanos donde la joven podría haberse refugiado.
El perfil de la víctima: madre, docente y sostén del hogar
La mujer atacada es profesora de matemática en escuelas de la zona y también se dedica a la actividad comercial para sostener a su familia. Según relataron fuentes cercanas, era ella quien cubría la mayor parte de los gastos del hogar y llevaba adelante una vida laboral intensa.
El pedido de que su hija trabajara, según declaró, no fue una exigencia, sino una necesidad. “Estamos pasando un momento económico difícil y necesitábamos que colaborara”, habría expresado ante los efectivos que la asistieron tras el ataque.
Una relación familiar tensa
Aunque no constaban denuncias previas por violencia familiar, allegados a la víctima señalaron que la relación entre madre e hija era tensa desde hacía tiempo, especialmente por el comportamiento agresivo de la joven.
Según trascendió, Sabrina había dejado de estudiar y no tenía ocupación ni ingresos propios, lo que generaba conflictos frecuentes dentro del hogar. Sin embargo, nadie imaginó que la situación pudiera derivar en un acto de violencia tan extremo.
El rol de la Justicia y la búsqueda
La fiscal Gallo dispuso un seguimiento constante del caso y solicitó colaboración a distintas unidades de la policía provincial. “Estamos haciendo todos los esfuerzos para dar con la sospechosa lo antes posible”, indicaron voceros judiciales.
También se espera el resultado de los informes médicos y psicológicos sobre la víctima, que permitirán determinar la magnitud de las lesiones y evaluar si existieron daños permanentes. Además, no se descarta un pedido de pericia psiquiátrica sobre la joven agresora, una vez que sea localizada.