Otro daño colateral del escándalo de la China Suárez: mirá quién es la nueva víctima.
La repercusión del romance entre La China Suárez y Mauro Icardi sigue escalando, no solo en los medios, sino también en la vida de quienes la rodean. Y esta vez, el impacto llegó a una figura que nada tenía que ver con la historia de amor, pero que terminó recibiendo la peor parte. Hablamos del estilista y amigo íntimo de la actriz, Juan Manuel Cativa, y su reconocida peluquería “Mala”.
Con años de trayectoria en el mundo de la estética y una cartera de clientas top como Lali Espósito y Emilia Mernes, la peluquería “Mala” se había posicionado como una de las más elegidas por las celebridades argentinas. Sin embargo, una simple publicación en redes sociales bastó para desatar una ola de comentarios negativos que obligaron a cerrar los comentarios del posteo y, luego, a contener una crisis de imagen inesperada.
Todo comenzó cuando La China decidió aclararse el pelo, apostando nuevamente al rubio. Como es costumbre en estos tiempos, la peluquería compartió el resultado en sus redes, mencionando a la actriz y destacando el trabajo del equipo. Pero lejos de generar admiración o fidelidad de seguidores, la publicación encendió una catarata de críticas.
Los usuarios empezaron a dejar comentarios cargados de ironía y reproches por la presencia de Suárez en el local. Algunos incluso apuntaron directamente contra el negocio, vinculando su imagen con la figura de la actriz, quien desde hace semanas es blanco de cuestionamientos por su vínculo con el futbolista Mauro Icardi, que le generó un escándalo con Wanda Nara.
Frases como: “¿Si me robo a algún marido me hacen precio?”, “¿Tienen promo para destruir familias?”, “Otra marca que te cargaste China…”, inundaron los comentarios, en un ataque masivo que nada tuvo que ver con el servicio prestado por la peluquería, pero que afectó de lleno a su reputación digital.
La situación escaló aún más cuando, al bloquear los comentarios en el posteo de Suárez, las críticas comenzaron a derivarse a los posteos de Lali y Emilia, clientas de la misma peluquería. Aunque ninguna de ellas hizo declaraciones públicas al respecto, la molestia de sus seguidores fue evidente, manifestándose en forma de reclamos, memes y mensajes sarcásticos.
