"No sé si se redactan en las redacciones de los diarios las sentencias judiciales. Los fallos judiciales se hacen en consonancia con los poderes fácticos", criticó Kicillof.
"No hay ni una sola prueba y se agrava por una cuestión constitucional que es que no había incumbencia de la presidenta ninguna de las decisiones. Es justicia ficción y fantasía. Nada de lo que se va a decir el miércoles ocurrió. Se busca generar una estrategia de disciplinamiento. Hay gravedad institucional y política", detalló.
Por otro lado, apuntó a las consecuencias políticas del fallo: "Está el agravante de que le impide presentarse en cargos públicos. Es persecución y proscripción como pasó muchas veces con líderes populares en la historia Argentina. Es el camino de Frondizi, Illia, Perón y por supuesto Cristina"
"No hubo sobreprecios, no hubo obras sin terminar y Cristina no podría haber sido responsable. Es un capítulo más de este proceso de persecución política, judicial, mediática al que llamamos lawfare, que tiene un capítulo argentino y uno internacional como fue el caso de Lula", concluyó.
El miércoles al mediodía la Cámara de Casación resolverá la apelación de la sentencia en primera instancia contra Cristina Kirchner por la causa vialidad. La expresidente había sido condenada a 6 años de prisión y prohibición de ejercer cargos públicos.
La expresidenta fue acusada de ser la jefa de una asociación ilícita y por el delito de administración fraudulenta agravada. En el veredicto, se la encontró culpable por defraudación al Estado, pero no por asociación ilícita. La Cámara de Casación debe revisar dicha condena y puede ampliar la condena, reducirla o aceptar lo dispuesto en primera instancia.