En paralelo a la reunión, rectores, organizaciones estudiantiles y gremios docentes entregaron cajas con planillas de firmas de la comunidad universitaria en apoyo al proyecto. La diputada jujeña Natalia Sarapura, que no integra ninguna de las dos comisiones, adelantó que acompañará el texto. Lo mismo se espera de Julio Cobos, Fabio Quetglas y el monobloquista Mario Barletta.
Además del dictamen de mayoría, hubo otros cuatro textos. El Frente de Izquierda presentó uno propio, que incorpora partidas para salarios de cargos ad honorem, presupuesto para ciencia y técnica y fondos para las obras sociales universitarias. La Libertad Avanza emitió un dictamen de rechazo, mientras que el radicalismo firmó dos dictámenes distintos: uno de la UCR y otro del denominado grupo conocido como los "libertarios con peluca" de la Liga del Interior. El PRO no firmó ningún despacho para evitar exponer sus internas.
El debate en el plenario
El plenario fue conducido por Alejandro Finocchiaro (Educación), mientras que José Luis Espert (Presupuesto y Hacienda) solo estuvo al inicio y se retiró minutos después. “Ni siquiera se queda a las reuniones que emplaza el pleno de la Cámara de Diputados”, lo cuestionó el diputado Maximiliano Ferraro (Coalición Cívica).
Durante el debate, Pablo Carro (UxP) denunció que “10.000 docentes universitarios renunciaron porque ganan una miseria” y detalló que el 70% cobra menos de $300.000. “Solo el 10% tiene cargos de dedicación exclusiva con un salario inicial de un millón de pesos”, afirmó.
Desde Encuentro Federal, Esteban Paulón alertó que muchos científicos abandonan el sistema por falta de financiamiento, y Ferraro remarcó que están “desmantelando la extensión e investigación, que son la esencia de la universidad pública”. En la misma línea, Danya Tavela (Democracia para Siempre) advirtió: “Cuando no invertís en ciencia y tecnología, te quedás afuera del mundo. Este es el modelo que propone actualmente el Gobierno”.