Paso a paso: cómo hacer hamburguesas de pollo caseras
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Preparar la mezcla. En un bowl grande, colocar el pollo picado (si no tenés procesadora, podés pedir que te lo piquen en la carnicería o picarlo con cuchillo bien afilado). Agregar el huevo, la avena o pan rallado, la cebolla y el ajo. Condimentar a gusto.
Unir los ingredientes. Mezclar todo con una cuchara o con las manos limpias hasta obtener una preparación integrada. Si la mezcla está muy húmeda, se puede agregar un poco más de avena o pan rallado.
Formar las hamburguesas. Tomar porciones y darles forma con las manos. Aplastar suavemente para que queden parejas. Colocar sobre una bandeja con papel film o separadores.
Reposar. Llevar a la heladera al menos 30 minutos para que tomen firmeza. También se pueden freezar en este punto, intercalando separadores para que no se peguen.
Cocinar. Cocinar en sartén con un poquito de aceite, en horno precalentado a 200°C o en freidora de aire por unos 12-15 minutos, dándolas vuelta a mitad de cocción. Deben quedar doradas por fuera y bien cocidas por dentro.
Consejos y variantes
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Si querés una versión más jugosa, usá mezcla de pechuga y muslo.
Se puede reemplazar la avena por pan rallado sin gluten para una versión apta para celíacos.
Para sumar vegetales, podés agregar zanahoria rallada o espinaca cocida y picada fina.
Acompañalas con palta, lechuga, tomate y un pan casero, o servilas sin pan con ensalada para una opción liviana.
Una receta fácil, saludable y que rinde
Las hamburguesas de pollo son una solución casera y económica para las comidas de todos los días. Además, permiten salir de la rutina sin complicarse: se pueden hacer en cantidad, guardar en el freezer y tener siempre a mano. En pocos pasos, con ingredientes que probablemente ya tengas en casa, podés resolver almuerzos o cenas con algo sabroso, nutritivo y versátil.
En tiempos donde buscamos alternativas más livianas y caseras, esta receta demuestra que comer rico y bien no tiene por qué ser difícil ni caro. Y lo mejor: las podés adaptar a tu gusto, darle tu toque personal, y prepararlas en familia.