De este modo, la blockchain layer 1, fundada por el brasileño Marcelo Brogliato, y que tiene en su red al primer Security Token regulado por la CNV brasileña en Latinoamérica, recompensa a los mineros que utilicen fuentes de energía limpias o renovables con el doble de tokens que daría a alguien que hiciera el mismo trabajo, pero con energía proveniente de la quema de combustibles fósiles.
Minería verde de criptomonedas: cómo funciona el proyecto
Por su parte, la compañía argentina Cryptogranjas utiliza la conversión de biomasa de residuos en energía, que será la que alimente a las computadoras encargadas de hacer la minería.
“Empezamos con los residuos agroindustriales. En particular, los agrícolas, como los excrementos de ganado vacuno y de pollo. El gas metano es una de las principales causas del calentamiento global. Si capturas estos residuos, podés convertirlos en energía en lugar de dejar que se acumulen en la atmósfera”, explicó Jim Sarasola, director ejecutivo de la empresa cripto local.
Esta iniciativa de incentivo a la minería de energías renovables se suma al compromiso de la blockchain brasileña con el medio ambiente. Al respecto, cabe recordar que los tokens Hathor se validan mediante un proceso llamado “minería fusionada”, la cual hace que no haya gasto de energía adicional para extraer tokens HTR, cuyos bloques se descubren junto con BTC.
De esta manera, “Hathor usa el mecanismo de consenso prueba de trabajo (proof of work), que es el más probado y seguro del mundo cripto, y el mismo que usa Bitcoin; pero sin generar un consumo extra de energía adicional”, finalizó Diego Guareschi, CMO de la compañía brasileña.