Por otro lado, el último informe de perspectivas publicado por Coinbase estima que el criptoinvierno se extenderá hasta bien entrado el 2023, especialmente para las altcoins.
La madurez del ecosistema y la liquidez del mercado sobresalen como los principales factores para explicar que habrá una suerte de selección natural hacia activos “de mayor calidad”.
“Creemos que la disposición de los inversores a acumular altcoins se ha visto gravemente afectada por el des-apalancamiento en 2022 y recuperarse puede llevar muchos meses”, señala el reporte. Al respecto, ubicaron al segundo semestre del 2023 como fecha estimada para el inicio de la recuperación entre las altcoins.
En otro aspecto, el informe también repasó al reciente colapso de FTX y reconoció que afectó gravemente al mercado, principalmente en términos de liquidez. “Las restricciones de liquidez también pueden interrumpir las operaciones normales del mercado a corto plazo, ya que muchas entidades institucionales cuentan con activos bloqueados en los procedimientos de quiebra de FTX”, explicó el trabajo.
Criptomonedas: qué pasará con Bitcoin y Ether
En un escenario bastante negativo para las criptomonedas alternativas, Bitcoin y Ether ofrecen pronósticos más optimistas.
El informe remarcó que los titulares a largo plazo de BTC cuentan con el 85% del suministro circulante y, además, destacó que Ethereum continúa liderando la industria de los contratos inteligentes. Con esos argumentos, se espera que tengan un comienzo de año alentador.
Finalmente, para los analistas de Coinbase, el mercado experimentó “un fuerte movimiento hacia la autocustodia y las finanzas descentralizadas tras el declive de FTX”, y esperan que esa tendencia continúe.
Asimismo, expresaron que se espera que las regulaciones del próximo año estimulen la confianza de los inversores institucionales y terminen con el ciclo bajista.