Gayoso debutó como arquero en Vélez, en donde estuvo entre 1987 y 1990, y luego tuvo una larga trayectoria en el ascenso argentino: All Boys, Deportivo Armenio, Almirante Brown, General Lamadrid y Tristán Suárez, e incluso en el Osorno de Chile. Como formador inició en el Fortín con Miguel Ángel Russo y llegó a Boca con Rodolfo Arruabarrena en 2014, con quien hizo un gran trabajo con Agustín Orión, hasta 2016 cuando llegó Guillermo Barros Schelotto.
Tras un paso por Racing en el cuerpo técnico de Eduardo Coudet, Gayoso volvió a Boca en 2020 de la mano de Russo y se ocupó del crecimiento de Estaban Andrada, quién alcanzó la Selección Argentina, y Agustín Rossi, que también llegó al seleccionado albiceleste. Gracias a Goyoso, Rossi logró convertirse en uno de los mejores arqueros del mundo en los penales.
"Sabía que Servio patea penales y de la forma que lo hace, porque en la semana estuve viendo videos, lo que me valió atajarlo", declaró Rossi post-partido sobre el penal que le contuvo al arquero de Rosario Central, Gaspar Servio.
La increíble estadística de Rossi en los penales
Luego del penal que le atajó a Gaspar Servio en el duelo ante Rosario Central, Rossi contuvo su 16° penal en el Xeneize, de los 54 que le ejecutaron: siete en tiempo regular y nueve en tandas.
De esos 54 penales, 13 fueron en tiempo regular y 41 en definiciones. ¿En detalle? 32 terminaron en gol y seis fueron desviados. Su efectividad indica que el 40,7% de los disparos no terminaron en gol y que contuvo el 29,6%.
En este contexto, Rossi superó por dos al arquero colombiano del Atlas de México, Camilo Vargas, y al portero del Sporting KC, Tim Melia, como el máximo atajador de penales del mundo.
Desde que el surgido en Chacarita contuvo su primer penal como profesional ante Defensa y Justicia, en 2016, suma 20 paradas en total (uno en el Halcón y tres en Lanús), mientras que Vargas paró 18 (once en tiempo regular y siete en definiciones) y Melia también con 18 (once en tiempo regular y siete en definiciones).