En apenas días, más precisamente el 23 de marzo, vencerá la moratoria previsional que le permite acceder a la jubilación a las personas que ya alcanzaron la edad pero no cumplen con el tiempo de aportes requerido por ANSES.
La moratoria previsional fue concebida como una herramienta transitoria para permitir que las personas en edad de jubilarse pudieran completar sus aportes, y llegará a su fin en apenas días. Lo que tenés que saber.
En apenas días, más precisamente el 23 de marzo, vencerá la moratoria previsional que le permite acceder a la jubilación a las personas que ya alcanzaron la edad pero no cumplen con el tiempo de aportes requerido por ANSES.
Desde la implementación de este esquema, se otorgaron 473.907 beneficios previsionales, lo que lo convirtió en un recurso clave para quienes no cumplían con los 30 años de aportes requeridos por el Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA).
La moratoria vigente desde marzo de 2023 fue concebida como una herramienta transitoria para permitir que las personas en edad de jubilarse pudieran completar sus aportes.
Este mecanismo tiene un alcance limitado: los períodos a regularizar deben ser anteriores a 2009, y su vigencia está definida por la ley para un plazo de dos años, con posibilidad de prórroga por otros dos. Sin embargo, el Gobierno descartó extenderlo.
Desde su implementación, la ley 27.705 permitió jubilarse a mujeres mayores de 60 años y hombres mayores de 65 que no reunían los años de aportes necesarios. Quienes adquirieron los períodos faltantes contrajeron una deuda con el Estado, que se descuenta mensualmente del haber jubilatorio.
A partir de marzo de 2025, quienes no alcancen los 30 años de aportes podrán acceder a la PUAM, una prestación equivalente al 80% de la jubilación mínima.
En marzo, la jubilación mínima es de $279.094,40 (sin bono de 70 mil pesos). El haber máximo, en tanto, quedó fijado en $1.878.041.
Sin embargo, el fin de la moratoria impactará particularmente en las mujeres, quienes representan el 61% de los beneficios otorgados mediante este esquema. Muchas de ellas no podrán jubilarse a los 60 años, ya que no alcanzarán los requisitos de aportes exigidos por el sistema contributivo.
La pensión es no contributiva, por lo que cualquier persona en edad jubilatoria la puede solicitar aunque nunca haya hecho ningún aporte.
Podrán acceder al beneficio las personas que cumplan con los siguientes requisitos: