Opinión

ChatGPT: por qué es la nueva estrella de la inteligencia artificial

La inteligencia artificial se mete cada vez más en el día a día de las personas. Ahora, con la irrupción de ChatGPT, la nueva estrella que todo el mundo quiere probar. De qué se trata y cómo utilizarla.
Vos le estás pidiendo que te ayude a vender a alguien que no es tu cliente

"Vos le estás pidiendo que te ayude a vender a alguien que no es tu cliente", afirma el especialista. (Foto archivo)

Por Martín Acosta (*)

La inteligencia artificial (AI) es esa magia detrás de todo que permite que una aplicación nos diga cómo llegar a diferentes lugares, que una red social nos brinde la posibilidad de conectar con otras personas, automatizar acciones en sistemas informáticos o chatear con bots en páginas webs, entre muchas otras aplicaciones. Y hace mucho que no es algo exclusivo del mundo de los ingenieros y desarrolladores. De hecho, ahora con ChatGPT, la AI se metió en el día a día de las personas.

Si bien el contenido y su programación se la dejamos a los expertos, en pocos ejemplos vemos sobradas muestras de que esta herramienta está en todos lados y entre nosotros, cada vez con un protagonismo mayor y con presencia hasta en las cosas más simples de la vida.

Qué es la Inteligencia Artificial

Por definición, es un sistema capaz de analizar datos en grandes cantidades, identificar patrones y tendencias y, por lo tanto, formular predicciones de forma automática. Es un avance de la tecnología que viene desde hace más de medio siglo y con el que interactuamos diariamente, aunque no estemos al tanto.

Actualmente, encontramos 4 categorías de inteligencia artificial. La primera es el aprendizaje automático, que se basa en la capacidad que un software o dispositivo tiene de aprender por su cuenta.

La segunda, es el aprendizaje profundo, que engloba y procesa más datos e información al mismo tiempo que utiliza otro de los tipos de inteligencia artificial y está estrechamente ligado con el Big Data.

La tercera de las categorías, es la de redes neuronales que intentan imitar el comportamiento de las células. A partir de una red de neuronas artificiales, se crea un sistema por el que reciben y procesan datos.

La cuarta y última de las categorías, y en la que nos vamos a centrar en este apartado, es el sistema experto. El mismo funciona a partir de una lógica racional que intenta imitar a un humano con dominio de una materia concreta.

Este tipo de IA la podemos encontrar, por ejemplo, en los chats automáticos que muchos servicios de atención al cliente ya tienen implantados. Se usan en muchos ámbitos destinados al cliente.

ChatGPT: cómo funciona y por qué es tan famoso

Hace poco nació una estrella que nada tiene que ver con la película. De todas las categorías que mencioné, a una le pertenece uno de los últimos lanzamientos más conocidos de los últimos tiempos: el ChatGPT.

Se trata de un bot (básicamente un robot) de AI generativa creado por OpenAI, que utiliza la tecnología GPT (Generative Pre-trained Transformer), para realizar conversaciones más naturales, a través de una red neuronal profunda llamada Transformer.

Además, es implementado en una amplia variedad de aplicaciones, incluyendo asistencia virtual, atención al cliente y creación de contenido automatizado.

Su capacidad es infinita y funciona con una arquitectura de red neuronal profunda (¡sí! ¡Red neuronal!) de muchas capas, que es entrenada con enormes volúmenes de textos, libros y páginas disponibles en la web.

Es, quizás, lo más parecido a lo que hacemos: estudiar desde que vamos al colegio, pero en este caso con un altísimo nivel de procesamiento de la información.

Desde que fue presentado a finales del año pasado, rápidamente explotó y cobró enorme popularidad debido a su amplia gama de capacidades, desde escribir guiones a contar chistes o difundir conocimientos sobre básicamente cualquier tema que existe.

Si bien inicialmente fue difundida la versión gratuita, OpenIA decidió brindar una solución más avanzada y monetizarla.

¿Lo puede usar cualquiera? Sí. Vos o yo ingresamos al chatGPT, formulamos una pregunta (la que se nos ocurra) y el bot responde con un nivel de claridad y sistematización sorprendente.

A diferencia de lo que conocemos con Google, el buscador más extendido y conocido, el Chat ordena las respuestas en una sola a partir de todo el aprendizaje que los desarrolladores le ofrecen.

Como siempre, cuanto mejor preguntemos y usemos las palabras más claras, mejor será la respuesta.

Además, le agrega la funcionalidad de utilizarse justamente como un Chat, para iterar sobre las respuestas y que todas nuestras consultas tengan relación dentro de ese mismo chat. Potenciando, de esta manera, la dinámica de búsqueda en forma de conversación.

Inteligencia artificial: hacia dónde vamos

Aunque hoy podemos afirmar que la IA está presente en las aplicaciones, en el cine, en la salud y hasta incursionando en la educación, surgen dos debates.

El primer interrogante al que nos enfrentamos, como ha sucedido siempre ante cualquier avance tecnológico, es si la IA reemplazará la intervención humana. Pero no tengamos miedo: la intervención humana es siempre fundamental, solo dejémosle darnos respuesta con alto nivel de procesamiento.

Debemos entender la tecnología como una herramienta complementaria al trabajo del ser humano. Por ejemplo: la IA podrá analizar miles de radiografías, pero jamás podrá superar el profesionalismo médico capaz de interpretarlas y de dar un diagnóstico certero para cada caso particular. Menos aún, comunicárselo al paciente con empatía.

Por otro lado, se abre la pregunta sobre el aspecto legal y cuáles son sus alcances. Sin duda, todavía hay un vacío en esta materia donde será imperioso empezar a trabajar para delimitar sus funciones.

(*) El autor es Tech Mentor de la fintech Paisanos.