Al mismo que tiempo que Logunov y Dmitriev se dirigían a la prensa local y regional, Reuters anunciaba que el Ministerio de Salud ruso declaró una eficacia mayor al 90% en relación a los efectos obtenidos en las pruebas con la Sputnik V -"citando datos recopilados a partir de las vacunaciones a la población y no de investigaciones en curso".
El directivo del RDIF resaltó por su parte que "Rusia prácticamente es el único país que empezó la vacunación masiva de sus habitantes" y que "ya se está vacunando gente en las provincias". En este sentido pero con respecto a nuestro país, vaticinó: "Pensamos que próximamente en conjunto con Argentina lograremos una vacunación de su población, y pasará a ser uno de los primeros países de América Latina que estará protegido".
Dmitriev había remarcado previamente sobre el diálogo entre la administración de su país y el argentino: "La cooperación mutua entre Argentina y Rusia en relación a la vacuna es muy importante, y hemos visto sin dudas ese diálogo que ocurrió al nivel de nuestros presidentes como muy positivo. Valoramos gratamente las palabras del presidente de Argentina, quien ha dicho que no es necesario politizar la vacuna, sino que hay que verla desde el punto de vista médico, ver qué vacuna brinda un efecto positivo. Nos agrada el enfoque argentino de la creación de una cartera de vacunas variadas. Nos alegra que Argentina vaya a adquirir 25 millones de dosis de vacunas a Rusia y vemos una confianza importante".
Además, el vocero reconoció el escepticismo que rodea a la Sputnik V y destacó que aunque "muchos tratan de jugar a la geopolítica atacando a la vacuna rusa" sus desarrolladores están enfocados en defenderla y demuestran su creencia en ella vacunándose ellos mismos. "Nuestro interés no es meramente financiero, está enfocado en la lucha positiva, en lograr un efecto positivo en la lucha contra el coronavirus", agregó.
Sobre el medicamento, los especialistas repitieron que "su ventaja clave es que está basada en adenovirales humanos, una tecnología históricamente comprobada". Logunov aclaró que según sus análisis hasta el momento, el efecto máximo del médicamento se logra después de la segunda toma. Del mismo modo detalló también que solo al final de la fase 3 -en unos 6 meses, aproximadamente- se sabrá con certeza cuál es el tiempo de permanencia de los anticuerpos en las personas que reciben la vacuna.
Según los voceros que participaron de la conferencia del día de hoy, unos 20 mil pacientes ya recibieron una primera dosis de la Sputnik V, y alrededor de 15 mil ya cuentan con una segunda dosis. En pocos días, información sobre los resultados en unos 10 mil participantes de la fase 3 estaría disponible para ser distribuida tanto por la ANMAT como por los desarrolladores rusos del medicamento. "Esperamos que en dos semanas podremos publicar datos sobre la efectividad de la vacuna. Nuestra posición es dar transparencia para que toda la información esté a la vista. Estamos totalmente abiertos como país", insistió Dmitriev.
Logunov mencionó finalmente que el instituto para el que trabaja ya entregó sus cultivos y sueros a otras plataformas en India, Corea del Sur y China, "ahora todo dependerá de la velocidad con la cual nuestros socios ahí emplazan su producción".
Además, agregó: "Gamaleya controla la producción de la vacuna fuera de nuestro país y esta debe pasar por muchos protocolos. Nosotros entregamos toda nuestra tecnología. Vamos a inspeccionar la producción y prestamos muchísima atención a la seguridad, eso es lo primero. Si la vacuna tiene diferencias, no será comercializada. Nuestros equipos están ahora en diferentes países, y las compañías que trabajan con nosotros son de alto rango, muy famosas en el mundo, y están enfocadas en la calidad".