Para proteger los derechos de los jóvenes menores de 18 años, en el país anfitrión del torneo existe una ley que prohíbe que trabajen después de las 20 horas. Sin embargo, hay una excepción para los deportistas, que pueden trabajar hasta las 23 horas. Aquí es donde surge el problema para España, ya que el partido comenzará a las 21 (hora local) y terminará alrededor de las 23.
Además del ajustado margen, la ley considera como jornada laboral todo lo que ocurre después del partido, como la firma de autógrafos y las entrevistas. Así, si Yamal juega este lunes, su trabajo finalizará cerca de la medianoche.
Aunque el diario Bild sostiene que España no corre riesgos de ser sancionada por la presencia del delantero ante Albania, varios expertos en la materia, como Stephan Graf, experto jurídico de la Universidad de Konstanz, aseguran que habrá consecuencias económicas y deportivas si el joven del Barça pisa el campo de juego del Merkur Spiel-Arena este lunes.