Automovilismo

VIDEO: de la ilusión a la bronca, así fue el toque de Albon a Colapinto en Bakú

El piloto argentino de Alpine sufrió un duro golpe en el Gran Premio de Azerbaiyán cuando Alex Albon lo tocó en plena carrera. Colapinto perdió ritmo, cayó en el clasificador y el tailandés fue sancionado.

VIDEO: de la ilusión a la bronca

VIDEO: de la ilusión a la bronca, así fue el toque de Albon a Colapinto en Bakú

La ilusión de Franco Colapinto en el Gran Premio de Azerbaiyán de Fórmula 1 duró menos de lo esperado. El argentino de Alpine, que había logrado una buena largada y se mantenía en el pelotón medio con chances concretas de sumar puntos, sufrió un duro golpe en la vuelta 18 de 51: Alex Albon, su excompañero en Williams, lo tocó de atrás en plena maniobra de defensa y lo mandó contra el muro.

El impacto provocó un trompo y un roce con las defensas, aunque Colapinto logró mantener el control de su A525 y reincorporarse a la carrera. Sin embargo, el daño ya estaba hecho: el auto perdió ritmo y el piloto cayó a la 19° posición, lejos de la zona de puntos que había quedado al alcance tras su primera detención en boxes.

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Una sanción para Albon, pero poco consuelo para Colapinto

La maniobra fue rápidamente revisada por los comisarios deportivos, que determinaron una penalización de 10 segundos para Albon por el toque indebido. De todos modos, la sanción no cambió el hecho de que Colapinto quedó condicionado para el resto de la competencia en Bakú.

El argentino buscó mantenerse competitivo en la segunda mitad de la prueba, pero la falta de dinámica en el Alpine tras el roce le impidió sostener el rendimiento inicial. Así, el sueño de meterse en el top 10 en uno de los circuitos más exigentes y recordados de su trayectoria se desvaneció.

Frustración y bronca en Alpine

Para Colapinto, cada oportunidad de destacar en la categoría reina es vital. Por eso, el toque de Albon dolió más de la cuenta: “No tenía mucho margen y estábamos en una posición expectante. Estas cosas duelen, más cuando no son tu responsabilidad”, reconocieron desde el entorno del piloto.

El resultado dejó un sabor amargo: de la esperanza de sumar puntos a la frustración de terminar relegado. Una postal de lo difícil que resulta consolidarse en la Fórmula 1 cuando los imprevistos -y los rivales- conspiran contra el rendimiento.