Esmeralda Mitre y Gerardo Romano se cruzaron en “Involucrados”, América. Ambos estaban invitados al ciclo para hablar sobre el debate presidencial del domingo. Esmeralda daba su opinión, la actriz es afín a la administración de Mauricio Macri, y al escucharla, Romano -que apoya al kirchnenismo- decidió pararse e irse para no compartir el piso con Mitre porque es una “Negacionista”, por sus dichos sobre la dictadura y el holocausto.