Qué pasó. En el mejor momento de San Lorenzo en el partido un cabezazo de Nicolás Blandi, entrando solo por el primer palo, puso el 1-1 y culminó con el invicto de Franco Armani en la Superliga. La cuenta paró en 964 minutos, sin ir a buscar la pelota al fondo de su arco, la segunda mejor marca de todos los tiempos en el fútbol argentina.