INSEGURIDAD

El padre de Paloma Gallardo pidió al fiscal que investigue una "posible violación" a su hija

Los padres de Paloma Gallardo y Josué Salvatierra siguen sin saber qué pasó con sus hijos, que fueron asesinados y sus cuerpos encontrados en un descampado.

El padre de Paloma pidió que investiguen una posible violación a su hija.

Omar, padre de Paloma Gallardo, la joven de 16 años que fue asesinada en Florencio Varelay cuyo cuerpo fue encontrado junto al de Josué Salvatierra en un descampado, pidió a la Justicia que investiguen una "posible violación" de su hija, en base a "algunas marcas" que detectó en su cuerpo cuando tuvo que reconocerlo.

En diálogo con A24 y otros medios presentes, Omar expresó: "Yo lo que vi en el cuerpo cuando tuve que reconocerlo...no puedo dar un panorama de lo que vi, no pude ver su cráneo pero vi otras cosas". Ante la repregunta de los periodistas dijo: "Posible violación".

Consultado sobre qué le hace suponer una posible violación, indicó: "Ciertas marcas que vi y le pedí al forense que por favor investiguen eso, porque la aventurilla juvenil no hace este tipo de cosas, tanto de un lado la parte baja como la parte alta".

"La ropa estaba sucia, llena de hojas, la tenía puesta. El resultado de la autopsia me dijeron más o menos que tarda entre 10 y 30 días", agregó.

Cómo encontraron los cuerpos de Paloma y Josué

Omar recordó que los padres de Josué se acercaron a la casa de Paloma porque los chicos no habían vuelto del gimnasio, a donde supuestamente habían ido, después de las 20 horas.

"Me comentaron que del gimnasio le habían dicho al papá de Josué que no habían ido al gimnasio y yo hice un par de llamadas al celular de Paloma y el celular estaba apagado. Entonces llamé al 911. Pensé un posible rapto o secuestro. Le pedí los efectivos 'vamos a la comisaría'. Ahí fue un calvario porque tuve más de 4 horas para que puedan hacer el acta de denuncia", detalló.

Y señaló que "presumían los oficiales que nos atendieron de que era una aventurita juvenil". "Y yo exigí que se investigue un posible rapto, un secuestro, tenía un montón de sospechas. Se burlaban en la comisaría", denunció.

Por eso, Omar llamó al 145 y logró que "se empezara a mover la cosa".