El presidente Alberto Fernandez encabeza junto a su par de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, la reunión de jefes de Estado del Mercosur en Puerto Iguazú, en la provincia de Misiones junto a los mandatarios de Uruguay, Paraguay, Bolivia y Guyana.
El presidente Alberto Fernandez encabeza junto a su par de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, la reunión de jefes de Estado del Mercosur en Puerto Iguazú, en la provincia de Misiones junto a los mandatarios de Uruguay, Paraguay, Bolivia y Guyana.
"Hablo de ser parte del mundo global con la fuerza de las economías que se desarrollan y no con la debilidad de las que se primarizan. Nadie puede condenarnos a ser los proveedores de la materia prima que otros industrializan y luego nos venden a precios exorbitantes", advirtió en su discurso en Puerto Iguazú, frente a los otros presidentes del bloque.
"No estoy parado en el lugar aislacionista en el que algunos me quieren ver parado. Quiero agregar valor a lo que producimos porque así podemos ser protagonistas del futuro. De lo contrario seguiremos perfeccionando la tremenda desigualdad que hoy posterga a nuestros pueblos", añadió el Primer Mandatario en un discurso centrado a desandar las divergencias ya manifestadas por Uruguay respecto de las negociaciones por el Tratado de Libre Comercio con la Unión Europea (UE).
"Tenemos una visión crítica de lo que se acordó entonces. Aquello fue el fruto de un esfuerzo muy desigual entre las partes. Así, el Mercosur fue el que más cedió siendo el bloque con menor nivel de desarrollo relativo en el Acuerdo", dijo respecto a las negociaciones externas, y en lo referente a la Unión Europea, recordó que "en más de una ocasión" se ha cuestionado el acuerdo tal y como fue suscripto a mediados de 2019.
Pr su parte, el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, se comprometió hoy a “concluir” el acuerdo de libre comercio entre la Unión Europea (UE) y el Mercosur durante su presidencia pro témpore, pero pidió al resto de los mandatarios del bloque reunidos en la ciudad misionera de Puerto Iguazú una “respuesta rápida y contundente” a la exigencia ambiental presentada por los europeos.
Lula calificó de “inaceptable” la carta enviada en marzo por la UE en la cual, según el gobierno brasileño, existirían amenazas de sanciones en caso de no cumplir con estándares europeos de cumplimientos ambientales. “Los socios estratégicos no negocian sobre la base de la desconfianza y la amenaza de sanciones. Es imperativo que el Mercosur presente una respuesta rápida y contundente”, dijo.
Previo al inicio de la cumbre, en su programa Conversación con el Presidente, que se emite en los medios públicos brasileños, el mandatario ya acusó a las naciones ricas de no haber cumplido los compromisos globales ambientales mientras buscan exigir a los países en desarrollo que quieren compensaciones para preservar sus bosques, selvas y recursos naturales.
Además, en la apertura de la cumbre, Lula volvió a defender la “adopción de una moneda común para realizar operaciones de compensación” entre países miembro, que “contribuirá a reducir costos y facilitará aún más la convergencia”. “Me refiero a una moneda de referencia específica para el comercio regional, que no eliminará las respectivas monedas nacionales”, precisó.
Asimismo, el líder del Partido de los Trabajadores pidió “ampliar y mejorar” los acuerdos comerciales con otros países de la región como Chile, Colombia, Ecuador y Perú, y se comprometió a “reanudar una ambiciosa agenda exterior para ampliar el acceso al mercado de nuestros productos de exportación”, un reclamo de Uruguay.