En este sentido, detalló que "la previsibilidad [de las medidas de restricción] está en el proyecto de ley que se envió al Congreso y toma parámetros objetivos que se vienen reflejando hace un mes o más en las distintas medidas que se van tomando con el DNU".
En este sentido, insistió: "Si hay 500 caso cada 100.000 habitantes es alarma epidemiológica, si tiene menos es alto riesgo epidemiológico. De ahí para abajo". Además, los rangos de ese semáforo epidemiológicos también estarán sujetos a la tasa de ocupación de las camas de terapia intensiva, que si es más del 80% también estás en alarma epidemiológica.
Por otro lado, Cafiero precisó que las restricciones regirán entre las 20 y las 6; los comercios deberán cerrar a partir de las 18 y los gastronómicos podrán funcionar por take away.
¿Qué pasará con las escuelas?
En relación con la presencialidad en las escuelas, explicó: "Hay parámetros objetivos y la Ciudad no los cumple". "La Ciudad nunca logró bajar de los 2500 casos. Sin los 9 días de cerrar en serio no hubiera bajado. Es una responsabilidad del jefe de Gobierno que sigue exigiendo sostener una actividad que supone una movilización muy grande", criticó.
"Las medidas de restricción generan mucha discordia, pero sirven. nosotros teníamos una curva de contagios que habíamos tocado los 40.000 casos y hoy tenemos 27.000. Las medidas representan un dolor de cabeza, pero sirven. Hay gente que piensa que atacando la vacunación, atacan al Gobierno, como si de ese modo van a tener un redito electoral y la sociedad lo va a castigar porque no cuidaron la vida de los argentinos", sostuvo Cafiero.
En este sentido, disparó: "Nosotros seguimos escuchando a epidemiólogos, intensivistas, para tomar decisiones, la oposición están escuchando a los que hacen marketing político. Larreta desde que Macri presentó su libro empezó a escuchar a los encuestadores".
Por otro lado, sobre los dichos del presidente, Alberto Fernández, dijo: "Se disculpó. Estaba manifestando una frase donde buscaba explicar de algún modo que la cultura de los inmigrantes. Creo que no hay mucho más para agregar. Los gobiernos no se evalúan por las frases, sino por las políticas públicas".
Por último, sobre la inflación, dijo: "Hay tensión de precios en nuestro país, hay problemas estructurales, venimos de una desorganización de la macroeconomía, son dos años de recesión y también tuvimos una tensión por el precios de los commodities. Tenemos que seguir encontrando la veta para ir bajando gradualmente, pero no se baja en dos meses. Nos exige generar herramientas, seguir agudizando el ingenio y avanzar en políticas con lo que puede llegar a las góndolas. Nosotros continuamos alineando las expectativas y pensando que los salarios le ganen a la inflación".