El encuentro será a las 11 hs en la sede del ministerio de Agricultura. Allí concurrieran los cuadros técnicos de Confederaciones Rurales Argentinas, la Sociedad Rural, Federación Agraria y Coninagro, quienes se verán cara a cara con el ministro Julián Domínguez y su equipo.
“La pelota la tienen ellos. Nosotros vamos a ir a escuchar y tratar de poner en números un debate que desde el Gobierno se plantea con tintes ideológicos”, contó una de las personas que hoy estarán presente en el edifico de Paseo Colón al 900.
Como punto de partida, los ruralistas toman las palabras de Domínguez cuando, luego del anuncio de la creación de cupos para la exportación de vaca conserva dijo que no se podía exportar más del 24% de la producción.
“Eso significa exportar unas 600 mil toneladas y este año vamos a cerrar cerca de 800 mil, los productores no van a aceptar esa propuesta”, añadió la fuente.
Con qué contrarrestará la Mesa de Enlace. Primero, analizando los datos del stock y la producción de carne para el año próximo, en la que difieren de los datos oficiales.
El Gobierno sostiene que el stock argentino es de 53 millones de cabezas pero, para los especialistas de las entidades, el rodeo es bastante mayor. “Están partiendo de la vacunación (antiaftosa) de diciembre y para evaluar el stock tenés que tomar la vacunación de otoño que es la que se hace con adultos y terneros”, explicó el técnico.
Sin entrar en detalles, Nicolás Pino, presidente de la SRA, se refirió a la aspiración de los dirigentes en materia comercial. “Le vamos a llevar los números para demostrarle porque le tiene que poner un voto de confianza al sector privado en el campo. Se pueden abastecer a los dos mercados sin afectar los precios”, afirmó en diálogo con este medio.
En concreto, según los cálculos de la Mesa de Enlace, el Gobierno podría liberar exportaciones por 1 millón de toneladas e igual la producción de carne alcanzaría para abastecer el mercado interno a razón de 50 kg/per cápita/año.
¿Se está lejos de ese escenario? Según un intercambio de información entre las autoridades y los ruralistas durante la semana pasada, el Ministerio estaba dispuesto a garantizar las exportaciones de las cuotas Hilton, 481, EE.UU y Colombia; los envíos a Israel y agregando a una plaza importante como la chilena, así como lo proveniente de un millón de toros y vacas categoría D y E.
En paralelo, se lanzarían préstamos a tasas subsidiadas para incentivar la producción ganadera.
En ese escenario, impulsaba la creación comisión integrada por funcionarios, técnicos de la Mesa de Enlace y otros actores de la cadena para monitorear el desempeño productivo y comercial y evaluar si es posible ampliar las exportaciones.
Los ruralistas piden además la liberación de exportaciones de vaca gorda (consumida en el mercado interno). A cambio estaría dispuesta a que se mantengan los cortes prohibidos. "En ese escenario, los precios internos deberían estar controlados, sin sobresaltos, e incluso los frigoríficos exportadores podrían mantener las baratas", señaló un especialista.
Pero más allá de las diferencias, la idea es dialogar y no romper puentes. "Pensamos que se puede llagar a un acuerdo, pero para hacerlo el Gobierno tiene que poner su parte y aflojar las restricciones para exportar", añadieron desde una de las cuatro entidades.
No subirían las retenciones a la carne
Y entre los mensajes de ida y vuelta, hubo uno que llevó tranquilidad a los dirigentes rurales. Según pudo confirmar A24.com Agro entre allegados a los presidentes de la Mesa de Enlace, a tres de ellos Domínguez les ratificó su fuerte oposición a una suba de derechos de exportación y les aseguró que "dará un paso al costado" si la decisión de subir retenciones gana en la interna oficial".
Otra señala tomada como positiva fue la reunión que el viernes pasado mantuvieron sectores de la agroindustria con el presidente Alberto Fernández y los ministros Martín Guzmán y Domínguez, de la que participó el vicepresidente de Coninagro, Elbio Laucirica.
Allí, si bien no sé tocó puntualmente el tema de carnes, se le pidió a la agroindustria "apoyo" tanto en materia de precios de los alimentos como en el aporte de divisas. "Se repasaron temas macro, se contaron los proyectos para impulsar la agroindustria y se habló de los precios internos y del aporte del agro a la economía", contó uno de los participantes del encuentro.
En tanto, se relativizó la posibilidad de una suba de retenciones. Desde el Gobierno parecen convencidos de que llevarlas al tope que fijó el Congreso (15%) no representaría un cambio significativo ni en los ingresos ni el desacople de precios, a la vez que no ven plafón político como para que los legisladores discutan una suba mayor.
Pero más allá de ese debate, desde le agroindustria plantearon la desconfianza por las distintas visiones que hoy existen dentro del Frente de Todos y sus temores de que el ala más dura del kirchnerismo gané la pelea interna, con consecuencias negativas para el campo. Sobre eso, no hubo respuesta.
Hoy comienza la semana del Gobierno en relación a la carne. El jueves, después de la reunión que Domínguez mantenga con los presidentes de la Mesa de Enlace, llegarían los anuncios.
De lo que surja dependerá la posibilidad de entrar en una nueva etapa de relacionamiento con el campo o caer en un nuevo grado de conflictividad.
Por eso, desde la dirigencia, entienden que esta semana el Gobierno se juega más en términos políticos que los estrictamente relacionados con la gestión de la inflación.